Foto: Roy Leyra
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Según datos revelados por la La Dra. C. María Guadalupe Guzmán Tirado, presidenta de la Sociedad Cubana de Microbiología y Parasitología y jefa del Centro de Investigaciones, Diagnóstico y Referencia del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kouri (IPK) hasta la fecha se han detectado 16 variantes del SARS-CoV-2 en Cuba.
Solo en este semestre, dijo: “Se ha detectado la variante original de Wuhan, pero en un caso, no se ha detectado más. Se han detectado 11 variantes y cinco patrones mutacionales. Estos patrones mutacionales realmente son variantes, pero internamente en el laboratorio usamos el término para separarlas de las variantes reconocidas internacionalmente”-
Algunas de estas cepas, “prácticamente las hemos perdido en el camino, pues ya no se detectan. Otras se van imponiendo, como es el caso de beta y delta”, afirmó en su intervención el espacio radiotelevisivo Mesa Redonda.
Por ejemplo: “La alfa la hemos detectado en varias provincias; sin embargo, no se impuso, lo que no quiere decir que no circule, pero no se ha impuesto, como sí hizo en Europa, en Reino Unido, en su momento. La beta sí se impuso y se extendió. La gamma la hemos detectado solo en dos casos. La delta, la última en ser detectada, se aprecia que está imponiéndose”.
A ello sumemos que entre las variantes de interés detectadas se destacan la de California (epsilon), con circulación en algunas provincias, y la P2 de Brasil, que se detectó y no ha avanzando.
La especialista dijo que de manera global, en Cuba en el primer semestre de 2021 (28 de diciembre-30 de junio) la variante más prevalente es la beta (441 muestras, 41.5%), le sigue la D614G (268 muestras, 25%) y la notificada en California (epsilon, 84 muestras, 8%).
En este sentido: “La delta se está imponiendo sobre la beta de Sudáfrica. Poco a poco va a ir imponiéndose. En mayo, la beta estaba en un 60% de las muestras estudiadas y en junio en un 51.3%. Sin embargo, la delta en mayo estaba en un 1.4% y en junio ya estaba en un 26%”, destacó.
Para que tengan una idea: entre las muestras procesadas entre el 1ro y el 7 de julio que provienen de Holguín, Villa Clara y Matanzas, el 64% es delta. Hasta el momento esta variante se detectado en una muestra en Artemisa (de un viajera); en La Habana, Holguín, Villa Clara, Ciego de Ávila y en Matanzas, esta última con el mayor número de casos.
Un total de 76 casos. “Alguien podría decir, ‘eso no es nada’. Pero cuando piensas en un caso, esa persona está inmersa en una ‘araña epidemiológica’. ¿De donde me infecté? ¿A quién infecté? Antes de mí, debe de haber tres, cinco o una determinada cantidad de personas, y después de mí, si no se cierra la cadena, habrá más personas”, recalcó.
Recordemos que la variante D614G fue la que circuló desde el inicio de la epidemia en 2020 hasta febrero de 2021 y ha ido siendo sustituida.
Beta es la variante que ha predominado en los pacientes graves y críticos, en el caso de La Habana y Camagüey. Pero en Matanzas, ya en junio, ha predominado la delta.
Cuba, que vive su peor rebrote desde el inicio de la pandemia, estableció la vigilancia genómica de SARS-CoV-2 para saber lo que sucede en el país, lo cual incluye el estudio de muestras aleatorias y una vigilancia dirigida al estudio de situaciones relevantes (zona de mayor transmisibilidad, brotes, fallos vacunales, viajeros, casos graves, críticos y fallecidos).
La propia doctora reflejó: “En este semestre se ha incrementado la transmisión en las provincias, se ha observado la introducción y diseminación paulatina de varias variantes, sobre todo la variante beta, que ha estado asociada a brotes grandes en algunos territorios y a casos graves y críticos y fallecidos. Y concluyó: “Las vacunas funcionan, pero hay que darle espacio a que tengamos una masa de vacunados. Y lo vamos a lograr”.
