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Texto: Redacción Cuba Noticias 360
El Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano estuvo lleno de polémica desde sus inicios. Y la gala de clausura, tampoco escapó de comentarios entre el circuito de cineastas y críticos del séptimo arte.
Solo la obra Abisal, del realizador cubano Alejandro Alonso, fue la única película cubana que obtuvo un Premio Coral en esta 43 edición. El filme obtuvo el premio a Mejor cortometraje documental, según publica la página oficial del evento.
Los realizadores Tommaso Santambrogio (Italia), Alana Simões (Brasil) y Eduardo del Llano (Cuba), integraron el jurado de esa categoría.
«La impecable elaboración visual, sonora y dramatúrgica de Abisal, así como la orgánica planificación interna de su discurso, se impusieron frente a un conjunto de filmes en el que los responsables de entregar el galardón reconocen disímiles valores estéticos y argumentales», destaca la revista cultural Rialta.
Para la clausura, Alonso había enviado desde Madrid un breve clip de video con el objetivo de ser proyectado en la ceremonia, junto a los discursos de otros cineastas premiados.
Pero este material, donde criticaba el clima político del país y la situación del cine independiente, fue excluido.
En este corto material, el directo expresó:»Lamentablemente, no podemos celebrar plenamente mientras haya una sola película cubana censurada por razones meramente políticas. Vemos con dolor pero no con sorpresa cómo continúan repitiéndose estas acciones con total impunidad, al mismo tiempo que se promueven ideas sobre un supuesto ‘cine de la decencia’ que solo se traduce en más odio, segregación y división».
El realizador cubano abogó, en este sentido, por un cine cada vez más diverso, inclusivo y totalmente libre.
Abisal ya ha recorrido otros festivales como Documenta Madrid 2021, donde alcanzó el Premio del Público, y obtuvo una Paloma de Oro al mejor cortometraje documental en la edición 64 del Festival DOK Leipzig.
La reciente edición del Festival Internacional de La Habana estuvo marcada, sobre todo, por un clima de censura y represión. Por ejemplo, Vicenta B, del cineasta cubano Carlos Díaz Lechuga, fue motivo de polémica cuando su creador denunció la censura de su filme en el evento.
