Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Desde marzo de 2020 la pandemia provocada por COVID-19 es un hecho en la Isla. Con baja tasa de incidencia por aquellos meses y alta en estos momentos, las medidas para protegerse contra el coronavirus poco han cambiado, jugando un papel fundamental el lavado de las manos, y principalmente, el uso del nasobuco o mascarilla.
Por aquel entonces, comenzaron a producirse en hogares, proyectos comunitarios y diversos centros laborales, nasobucos de tela, además se fomentó también su elaboración con spots televisivo al estilo DIY (Do It Yourself) por la televisión.
Sin embargo, no es hasta finales de este mes de junio, que la Mayor de las Antillas ofrecerá mascarillas desechables, higiénicas y quirúrgicas de producción nacional, elaboradas por la Empresa de Confecciones Textiles Unimoda, del Grupo Empresarial Gardis.
Hasta ahora, los cubanos adquirían estas en algunos centros de trabajo donde se las entregaban, por el sistema de Salud Pública, o generalmente, comprándolas en el mercado negro y a cuentapropistas que las revenden, con precios a partir de los 15 CUP, si son de las desechables y por cantidad, o en dependencia del modelo de las mascarillas, podrían llegar a 80 o 100 CUP, quizás más.
Anunciada la producción desde el mes de febrero de 2021, esta comenzaría en marzo después de preparar la máquina necesaria para crear el valioso medio de protección, y que permite la confección, esterilización y empaquetamiento de alrededor de un centenar de unidades por minuto en dos líneas de trabajo, sinónimo de unas 84 mil mascarillas por cada turno de ocho horas.
La venta de las mascarillas hechas en Cuba comenzará por el priorizado sector de la Salud Pública, por el nivel de exposición de sus trabajadores, explican medios estatales. A este, le seguirán otros organismos con alto riesgo de contagio como turismo, transporte y comercio, entre otros.
En último lugar, después de priorizarse esos sectores, iniciarán las ventas a la población, que, según Maribel Rodríguez Argüelles, directora general de la empresa Unimoda, se comercializarán en la red de tiendas e incluiría a los establecimientos en moneda libremente convertible (MLC) y otros en moneda nacional (MN), a precios muy asequibles, puntualizó.
Actualmente se atraviesa la fase de prueba y puesta en marcha, donde se evalúa la eficacia del proceso productivo y además se perfecciona la capacitación del personal de trabajo, integrado mayormente por jóvenes procedentes de la propia casa de altos estudios, compartió la directora general.
