Texto: Redacción Cuba Noticias 360
En distintos sitios especializados es noticia la caída del dólar estadounidense en el mundo. De acuerdo con el índice elaborado por la multinacional Bloomberg, esta moneda no ha parado su decrecimiento desde marzo del 2020, y actualmente se encuentra en su nivel más bajo con respecto a otras monedas fuertes desde 2018.
Esta situación es un efecto directo de la pandemia de la COVID 19 que sumió a los países en una crisis económica notable.
Para atenuar los efectos de la recesión registrada a nivel global, Estados Unidos tomó varias medidas. Entre ellas, estuvo la impresión masiva de billetes, sobre todo para las distintas entregas de ayuda que realizó la administración de Donald Trump.
Además, reportes de prensa señalan que la Reserva Federal de Estados Unidos, quien controla la política monetaria nacional como lo hacen los bancos centrales en otras naciones, redujo drásticamente la tasa de interés del dólar hasta dejarla casi en 0%.
Al ser la tasa de interés directamente proporcional al costo del dinero de un país, mientras más baja, menos vale su divisa. Por tanto, el dólar pierde valor con respecto a monedas de otras economías fuertes, como el euro.
A pesar de este debilitamiento, en América Latina no se ha sentido del todo así. Tarde en comparación al resto del mundo, la caída del dólar se ha reflejado hace solo unos meses en las economías más grandes de la región.
Según Diego Mora, ejecutivo de la consultora de inversiones XTB, México es el país donde más se ha depreciado el dólar, seguido por Chile, Colombia y Brasil.
Sin embargo, aunque esta divisa esté cayendo, su demanda en la región sigue casi igual, pues es considerada una «moneda segura» para muchos.
Las monedas de las economías latinoamericanas son más riesgosas, dijo Mora a BBC Mundo.
Una lógica similar podría aplicarse al contexto cubano. Si bien el cambio oficial es un dólar por 24 pesos cubanos, las instituciones bancarias no venden la moneda y en el país cada día es más difícil encontrar productos de aseo, comida u otros fuera de las tiendas en moneda libremente convertible (MLC).
Como si fuera poco, el mercado “informal” también está “operando” en USD, por lo que es común encontrar anuncios de venta de ropa, calzado, celulares, computadoras, entre otros, en los que piden dólares como pago.
Esta situación ha generado una alta demanda de la moneda estadounidense, lo que ha hecho que su precio en “la calle” ya alcance los 50 pesos cubanos. Y esta tendencia al alza, aunque el dólar baje en el mundo, en Cuba no parece cambiar por el momento.
