Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
En Cuba, en pleno 2022, casi un millón de personas tienen dificultad para acceder al agua potable, uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
Con poco más de 11 millones de habitantes en la isla, según datos oficiales del último censo de población realizado en 2012, esto significaría que casi el 10% de sus habitantes tiene problemas con el abasto de agua, de los cuales más de 418 mil no reciben el servicio e los horarios y ciclos establecidos, según datos oficiales.
Guantánamo, Holguín, Las Tunas, Camagüey, Sancti Spíritus, La Habana y Artemisa son las provincias más afectadas, explicó al medio estatal Granma el director general de Agua, Saneamiento y Drenaje Pluvial, José Antonio Hernández Álvarez.
Unos 400 mil cubanos reciben e agua potable a través de pipas, debido a las averías en las líneas de los acueductos y roturas en los equipos de bombeo.
Según Hernández Álvarez en los próximos meses la cifra aumentaría al doble, a pesar de no contar con todos los recursos necesarios para enfrentar la crisis. El servicio se ve afectado por la escasez de baterías y neumáticos, así como la rotura de los vehículos que abastecen a los barrios sin acceso a agua potable.
Además de la disponibilidad de camiones y piezas para ellos, ahora se suma la dificultad con el combustible, que según las máximas autoridades del país, está en falta a causa de la salida de funcionamiento de la termoeléctrica Antonio Guiteras, que ha traído un déficit en la generación eléctrica y ha provocado un mayor uso de los grupos electrógenos que consumen combustible diésel.
Datos oficiales informan que actualmente unos 140 ml cubanos se perjudican de las roturas de los equipos de bombeo, y que solo se han podido comprar en el mercado internacional unas 100 bombas desde hace tres años, apenas la cuarta parte de las 400 que deberían reponerse anualmente, según la normativa internacional.
De acuerdo con los funcionarios, las principales causas de la falta de abasto de agua son el embargo estadounidense y la pandemia de Covid-19. Sin embargo, aunque muchos factores influyen, el problema del agua en Cuba es mucho más antiguo que el coronavirus.
Por ejemplo, la cantidad de salideros activos en el país supera los 600 mil actualmente, de los cuales casi la mitad de reportan en La Habana y también los especialistas comentan que la sequía afecta desde el 2021 a más del 70% de la isla, tal cual ha publicado el Instituto Nacional de Meteorología.
