Foto: EFE
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Diversas son las quejas en redes sociales y otros espacios denunciando la arbitrariedad de los procesos judiciales celebrados tras los hechos del 11 de julio (11J).
De cierta forma, a raíz de estas protestas, las autoridades cubanas han reducido varias condenas de personas inculpadas por los hechos que sacudieron al país a mediados del pasado año.
El Tribunal Supremo Popular de Cuba (TSJ) redujo hasta en 10 años las penas de cárcel de 13 de los manifestantes y cambió a régimen de trabajo correccional a otros dos, sin internamiento en uno de los casos.
Un reporte de la agencia EFE precisa que esta revisión es la primera sentencia del TSJ ante la apelación de un grupo de condenados tras lo ocurrido en el barrio de La Güinera, Arroyo Naranjo. “La nueva sentencia, a la que tuvo acceso Efe, es firme y fija penas de prisión por un total de 179 años, con casos individuales de hasta 22 años”, aclara el texto.
El fallo del TSJ resuelve un recurso de casación presentado por los 15 procesados, quienes argumentaron que no se les debió juzgar por el delito de sedición.
Algunos aducieron que se les debió procesar por delitos como desorden público, mientras otros aseguraron que hubo “quebrantamiento de formalidades procesales” y de “garantías individuales” durante sus enjuiciamientos.
Varios de los manifestantes habían sido condenados por el Tribunal Provincial Popular de La Habana en primera instancia con hasta 30 años de privación de la libertad.
De acuerdo con el TSJ, estas decisiones del tribunal provincial no fueron atinadas, al no contemplar en la imposición de las penas que nueve de los acusados reconocieron los hechos y colaboraron en su esclarecimiento.
Igualmente, calificó las penas en primera instancia de “en extremo rigurosas” y se acogen al “motivo del recurso solicitando generosidad” en el caso de 11 de los sancionados.
