Foto: CiberCuba
Texto: Darcy Borrero
Las patrullas de la Guardia Costera en los Cayos de la Florida interceptaron a ocho nuevos migrantes cubanos, quienes fueron repatriados.
Según el comunicado de las autoridades marítimas, siete de los migrantes fueron detenidos frente a las costas de Islamorada, una vez que la tripulación de una aeronave de la división de Operaciones Aéreas y Marinas de Aduanas y Protección Fronteriza descubriera la embarcación en la que viajaban los migrantes cubanos, comúnmente llamados balseros porque sus precarias embarcaciones suelen ser tan inseguras como una balsa.
En Duck Key, fue rescatado el octavo migrante. Intervinieron en la operación un equipo policial de la estación de Marathon y agentes de interdicción marítima. —Patrullamos por aire y mar con nuestras agencias asociadas para tratar de contrarrestar los viajes inseguros —dijo el teniente Mario Gil, oficial de enlace entre la Guardia Costera y la embajada de Estados Unidos en La Habana.
—La pérdida de vidas es demasiado grande para hacer estos viajes en embarcaciones inseguras —lamentó, pero las políticas migratorias no benefician a quienes intentan entrar por esta vía a la nación norteña y, por lo general, son repatriados.
Aunque ya no está vigente la política de ‘pies secos, pies mojados’, que permitía a los cubanos ser admitidos en territorio estadounidense, continúan los intentos de entrada por mar a este país.
La situación de crisis en la isla caribeña sigue empujando a muchos al mar, sin más tabla de salvación que la esperanza de no morir en el intento ni ser devueltos a Cuba. En el periodo comprendido entre el 1ero. de octubre de 2020 y este último hecho, la Guardia Costera ha interceptado a 87 cubanos. Antes, durante el año fiscal 2019, interceptó a 314.
Cuando son rescatados de sus embarcaciones, estos migrantes se incorporan a un barco del Cuerpo de Guardacostas o a un helicóptero —en dependencia de la operación de rescate—, reciben comida, agua, refugio y atención médica básica. En este contexto de pandemia, se hace más complejo el protocolo para interceptar a quienes buscan refugio en Estados Unidos. Los miembros de la tripulación de la Guardia Costera deben tratar de minimizar la exposición potencial al contagio de COVID-19.
