Fotos: Redes Sociales de los artistas
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
“Para Bailar” irrumpió en la televisión cubana el 10 de junio de 1978, marcando el inicio de una etapa inolvidable en el panorama artístico de la isla. Concebido por Eduardo Cáceres Manso, este programa no solo ofrecía un espacio en el que jóvenes bailarines demostraban su destreza, sino que también reunía a miles de espectadores que, cada domingo, se detenían para disfrutar de su vibrante propuesta. Emitido hasta el 26 de marzo de 1983, este espacio se transformó en una plataforma casi única que impulsó a futuras figuras de la música, el teatro y la televisión cubanas.
Con el éxito del programa, Lili Rentería, por ejemplo, se catapultó a la fama. Su participación posterior en el filme Los sobrevivientes (1979), dirigido por Tomás Gutiérrez Alea, marcó el inicio de una carrera que la llevó a formarse en la Escuela Nacional de Arte (ENA).
En 1991, su trayectoria se expandió a Venezuela, donde incursionó en varias telenovelas, y para 1997 se estableció en Estados Unidos. En Miami, Rentería fundó Teatro Abanico y se lanzó al mundo de la producción artística con El último de los Amantes de Neil Simon, complementando su labor con exposiciones de arte, ciclos cinematográficos, conferencias, conciertos y espectáculos de danza.
Recientemente, se le ha visto en varias obras de teatro que han sido aclamadas por la crítica y la comunidad cubana en Miami, además la reconocida actriz ha destacado por su participación en Plantadas, película de Lilo Vilaplana que evoca la historia de las primeras mujeres opositoras al gobierno de la isla.
La popularidad de “Para Bailar” también dejó su impronta en la carrera de Albertico Pujol, reconocido rostro de la televisión en la isla. Su paso a la gran pantalla se materializó en filmes como Guardafronteras (1981) y Los pájaros tirándole a la escopeta (1984), y sus interpretaciones en series tales como Su propia guerra, Gracias Doctor y Violetas de agua lo consolidaron ante el público.
Tras pasar un tiempo en Colombia, en 2011 Pujol decidió abandonar Cuba y hoy reside en Miami. A través de sus redes sociales se ha conocido de los recientes proyectos de este querido actor que, según ha mencionado en alguna ocasión, su crítica abierta a la situación política cubana le ha costado el derecho a regresar a la isla desde 2019.
Por otro lado, Néstor Jiménez ha forjado una carrera sólida en el cine, el teatro y la televisión. Su participación en cintas como Los pájaros tirándole a la escopeta, Zafiros, Locura azul, Mi socio Manolo, Plaff y Demasiado miedo a la vida lo han hecho recordado.
Formado en la ENA, Jiménez continúa trabajando en Cuba y en los últimos tiempos se le ha podido ver en varias telenovelas y otros espacios drmatizados de la televisión. Además, en el arte de las tablas integra el grupo Vital Teatro, liderado por Alejandro Palomino.
Salvador Blanco fue uno de los presentadores más populares de “Para Bailar”; además su historia fue muy polémica al ser separado del espacio y encarcelado durante tres años por intentar abandonar la isla durante la emisión del programa.
En 1985, Blanco logró partir hacia Europa y, para 1990, se estableció en Estados Unidos, donde ha desarrollado una extensa carrera como actor, animador y presentador.
Finalmente, Carlos Otero, quien asumió un papel crucial al sustituir a Salvador Blanco y logró un reconocimiento en las pantallas por su carisma. Otero estuvo vinculado a ciertos rumores que lo acusaban de haber revelado información sobre la situación de Blanco.
No obstante, durante una entrevista afirmó que “desde luego, les dije la verdad, que no sabía nada. Salvador y yo teníamos dos estilos diferentes, pero sosteníamos una buena relación, incluso un par de veces celebramos nuestros cumpleaños juntos: él visitaba mi casa y yo la suya”. Asimismo, explicó que probablemente “de ahí viene el rumor de que yo lo chivateé”.
Radicado hoy en Miami, Carlos Otero es recordado en la isla por su conducción en el humorístico Sabadazo, donde colaboraron artistas como Osvaldo Doimeadiós, Boncó Quiñongo, Antolín El Pichón, Gustavito y Ulises Toirac.
Poco después de su llegada a Estados Unidos, se convirtió en conductor del show TN3 en América TV y actualmente dirige La Hora de Carlos Live.
El legado de “Para Bailar” perdura no solo en la memoria colectiva de Cuba, sino en las exitosas trayectorias de aquellos que lo vivieron en carne propia, demostrando que la pasión y el talento pueden trascender fronteras.
Actualmente sigue siendo uno de los programas más emblemáticos de la televisión cubana, marcando una época en la que la danza, la música y la cultura popular se entrelazaron en un formato único e irrepetible.