Fotos: RL Hevia
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Otra vez el béisbol se vistió de embajador entre dos países cuyo diferendo político ha marcado su relación en las últimas décadas. Muy alejado del ambiente que se vive en oficinas, edificios o instituciones gubernamentales, ya sea de Washington o La Habana, el legendario estadio Latinoamericano acogió este fin de semana dos encuentros amistosos entre jugadores veteranos de Cuba y del estado de Maine, de Estados Unidos. Por unas horas, la armonía y la camaradería reinó en el templo por excelencia del pasatiempo nacional de los cubanos, que volvió a ser testigo de un nuevo capítulo de hermandad entre ambas naciones.








