Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Una prohibición decidida por el anterior presidente de Estados Unidos Donald Trump con respecto al envío de remesas a Cuba, volvió a ser noticia por estos días, ante la solicitud de líderes políticos y civiles demócratas y republicanos del sur de Florida al actual mandatario Joe Biden, quienes piden reanudar esta posiblidad reclamada por los cubanos, tanto dentro como fuera de la Isla.
Considerando que se ha “subestimado” el costo humano causado, en una carta enviada a la Casa Blanca, los firmantes, entre ellos el alcalde de Coral Gables, Raúl Valdés-Fauli, detallan que el asunto requiere “atención urgente sin importar las inclinaciones políticas”.
Esta documento indica que: “Estos flujos hacia Cuba se han producido durante más de 20 años, llevando fondos muy necesarios para aumentar los ingresos de los hogares, especialmente a la luz de las dificultades económicas debido a la Covid-19”.
De acuerdo con una nota publicada por El Nuevo Herald y como expone la carta, entre 2.000 y 4.000 millones de dólares anuales solían transferir los cubanos desde Estados Unidos a sus parientes necesitados en la isla, principalmente desde Florida.
Pero el panorama cambió cuando en noviembre pasado, la Administración Trump prohibió el envío de remesas a empresas como Western Union, que concentraba la gran mayoría de los envíos de EE.UU. a la Isla.
Por su parte, la consultora Havana Consulting Group, ubicada en Miami, revela que las remesas enviadas a Cuba desde 1993 hasta 2019 se valoran en 46.800 millones de dólares, de los cuales 18.871 millones llegaron por vías formales, principalmente por las empresas con contratos con la empresa estatal Fincimex, como Western Union
Liliam López, presidenta de la Cámara de Comercio Hispana del Sur de Florida, una de las firmantes y suscriptoras de la carta, pide al Gobierno de Biden que considere “restaurar los flujos financieros entre familias en extrema necesidad”.
“No hay duda de que el gobierno cubano aún deja un margen significativo para mejorar los derechos humanos, la libertad de prensa y las reformas económicas, pero el canal de remesas fue un sistema que realmente funcionó bien en la Isla”, añade el citado texto.
Otro firmante es el profesor Guillermo J. Grenier, presidente del Departamento de Estudios Globales de la Universidad Internacional de Florida (FIU), a cargo durante años de sondeos entre la comunidad cubana del sur de Florida.
Y la lista continúa con Álvaro Saralegui, jefe de Iniciativas Hispanas de Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), Freddy Balsera y Sonia Díaz, presidente ejecutivo y vicepresidenta senior, respectivamente, de Balsera Communications, además de Ricardo Morales vicepresidente senior de Pacific National Bank, entre otros.
Se deja claro que: “Los gobiernos no se ven perjudicados por estas políticas, ni las grandes empresas, ni los militares cubanos sufrirán; las verdaderas víctimas son las personas. El pueblo cubano sufre mucho y este hecho merece nuestra atención”.
Aproximadamente el 50 % de los cubano-estadounidenses del condado de Miami-Dade envía dinero regularmente a la Isla, según una encuesta de la FIU de 2020.
