Foto: Archivo CN360
Texto: Hugo León
Para muchos ya es un secreto dicho a voces: el senador republicano Marco Rubio se perfila como el nuevo Secretario de Estado de EEUU, en un movimiento que subraya una nueva estrategia en la política exterior estadounidense liderada por el recién electo presidente Donald Trump.
Sería la primera vez que un hispano, hijo de cubanos emigrados, llega a ese puesto, uno de los más importantes en el país.
El senador cubanoestadounidense por el estado de Florida, conocido por sus firmes posturas contra los regímenes autoritarios de América Latina y su enfoque conservador en temas internacionales, será el encargado de dirigir la diplomacia de la nación a partir de 2025, según se adelantan a decir no pocas agencias de prensa y medios estadounidenses.
¿Quién es Marco Rubio, el cubanoamericano que se perfila como Secretario de Estado?
Marco Rubio, de 53 años, nació el 28 de mayo de 1971 en Miami, Florida, hijo de inmigrantes cubanos. Creció en una familia trabajadora, en medio de la comunidad latina miamense, lo cual influenció profundamente su perspectiva política y su interés en los temas de derechos humanos y democracia en América Latina.
Graduado de ciencias políticas y de derecho, su carrera política comenzó en la Cámara de Representantes de Florida, donde fue elegido en el año 2000 y llegó a ser presidente de la misma en 2006. En 2010, fue electo senador por Florida, cargo en el que ha trabajado por temas de seguridad nacional, economía, y relaciones exteriores, especialmente con un enfoque crítico hacia los gobiernos autoritarios de la región, y actualmente ostenta el cargo de Senador del Estado de Florida.
La visión de Marco Rubio sobre Cuba, Ucrania y otros temas vitales
Marco Rubio es conocido por sus firmes posturas conservadoras en temas de inmigración, defensa, y su papel como una figura prominente del Partido Republicano en debates sobre la política exterior estadounidense.
Aunque inicialmente haya sorprendido a muchos que Trump lo eligiese porque anteriormente han tenido desacuerdos, tal decisión representa una oportunidad estratégica para unificar al Partido Republicano en torno a un enfoque de mano dura en política exterior y de acercar a la comunidad latina ante el reto que plantea Trump de las deportaciones, que podrían separar a los hispanos y otros migrantes de la fórmula republicana.
Rubio es un crítico constante del gobierno cubano y del régimen venezolano, ha abogado por años en contra de las políticas de apertura hacia el Partido Comunista reinante en Cuba.
El Senador ha expresado múltiples veces que el bloqueo del que se queja el gobierno de La Habana, al que culpa por todos sus males, existe solamente desde el propio gobierno hacia el pueblo, y ha puesto ejemplos de que Cuba sí comercia con decenas de países a lo largo y ancho del mundo e incluso importa y exporta mercancías y productos por cientos de millones de dólares con EEUU.
También ha hecho llamados a no perder de vista la influencia económica y tecnológica de China y a no permitir la dependencia total de las importaciones desde el gigante asiático.
Por otro lado, ha llegado a votar contra los paquetes de ayuda financiera de Washington a Ucrania en la guerra de este último contra el invasor ruso, y coincide con Trump en que Europa debe adquirir más protagonismo en temas de su propia seguridad, y no ver a EEUU como el gendarme y único responsable de su protección.
Pobre los cubanos si eso pasa! No sólo los de Cuba, sino los que están en EUA tratando de ayudar a sus familias. Este señor no es cubano, ni siente nada por Cuba, sólo lo que sintieron los mafiosos que vieron como se quedaban sin negocios en 1959. Y cambia casacas de marca mayor, viendo de que lado se vive mejor siempre.