Foto: Emmanuel Vigil
Texto: Darcy Borrero
Desde la tarde del 27 de noviembre de 2020, cuando el Canciller de Bolivia Rogelio Mayta recibió al nombrado Encargado de Negocios de la República de Cuba, Embajador Danilo Sánchez Vázquez, se reabrieron las puertas al diálogo entre ambos países, y la prensa se mantuvo atenta al posible retorno de la brigada médica cubana a la nación andina, de donde había sido expulsada bajo la presidencia de facto de Jeanine Áñez.
En aquel momento, sin el peso de la pandemia de Covid-19, Áñez basó su decisión en el argumento de que durante los 14 años de presidencia de Evo Morales, Bolivia gastó cerca de “147 millones de dólares” en financiar una brigada médica de la que “menos de un tercio” eran médicos profesionales.
Meses después, con la llegada de Luis Arce al gobierno y la restauración de la democracia en Bolivia tras las elecciones de noviembre, vuelve al debate la posibilidad de que retorne al país la brigada internacional de médicos cubanos que por 13 años dio “más de 70 millones de atenciones sin costo en todo el territorio nacional”.
Arce tendrá que dar la última palabra en un contexto en que el Colegio Médico de Bolivia y el sindicato de profesionales de la salud rechazan la vuelta de los profesionales cubanos con la justificante de que les quitan el trabajo.
Según Sputnik, el Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes) iniciará un paro contra el Gobierno de Luis Arce en caso de que regrese la brigada de médicos cubanos a Bolivia.
En tanto, el pasado 7 de diciembre el encargado de negocios nombrado por La Habana en La Paz, Danilo Sánchez, se refirió a las altas posibilidades de que la isla coopere con el nuevo Gobierno de Bolivia, incluso mediante el regreso de la brigada médica que antes fue expulsada.
“Venimos abiertos para escuchar las propuestas, las solicitudes, creo que podemos y tenemos muchas posibilidades de cooperar en muchas ramas: en la rama científica, en la rama de educación, en la rama de la salud, efectivamente nos interesa mucho la cooperación en el ámbito comercial, en el ámbito de la inversión”, afirmó el diplomático, citado por medios locales luego de su reunión en La Paz con Freddy Mamani, el presidente de la Cámara de Diputados, sobre el retorno de la brigada de unos 700 médicos que salieron de Bolivia.
Sin embargo, Cubaminrex, desde la llegada del representante cubano a La Paz, no entra en detalles sobre el proceso. La cuenta en Twitter de la embajada cubana en Bolivia tampoco profundiza en este tipo de contenidos.
Solo dicen, en términos generales y a modo de reseña de las conversaciones, que “ambas partes ratificaron la voluntad común de continuar trabajando en el fortalecimiento de las relaciones de amistad y cooperación que caracterizan los vínculos entre ambos gobiernos y pueblos y abordaron otros temas de interés mutuo en las relaciones bilaterales y el contexto regional”.
Las brigadas médicas cubanas han llegado a numerosos países en este 2020 marcado por el coronavirus, en medio de un cuestionamiento cada vez más fuerte y sistemático sobre estas por parte de organizaciones como la OEA. En encuentros de la Organización Panamericana de la Salud este ha sido uno de los temas en discusión luego de que se haya reunido un grupo de testimonios de médicos desertores sobre sus vivencias en las llamadas misiones solidarias internacionalistas, de las cuales Cuba saca cuantiosas ganancias con un margen mínimo de ingresos para los profesionales de la salud que lo arriesgan todo en el terreno.
