Foto: AFP
Texto: Hugo León
Los senadores republicanos Marco Rubio, Rick Scott y Jim Risch, (por Florida los dos primeros e Idaho el tercero) instaron al presidente estadounidense Joe Biden reconocer al Gobierno de Cuba como “uno de los principales patrocinadores estatales del terrorismo en el mundo”.
En una carta de dos páginas dirigida al presidente, los políticos pidieron además que se mantengan las restricciones a empresas de su país para que no comercialicen con entidades militares cubanas.
La misiva pide que, en cumplimiento con la seguridad nacional de Estados Unidos y el apoyo histórico de la libertad del pueblo cubano, la democracia y el respeto por los derechos humanos, la administración de Biden no revoque la Ley para la Democracia en Cuba de 1992 (conocida como Ley Torricelli).
Además, pide que no se rescinda la Ley para la Libertad y la Solidaridad Democrática Cubanas de 1996 (Ley Helms-Burton). El texto recuerda que ambas establecen que las restricciones económicas solo se levantarán cuando se celebren en Cuba elecciones libres.
Rubio, Scott y Risch demandaron que no se repitan las concesiones que el expresidente estadounidense Barack Obama otorgó al Gobierno de la isla durante su mandato (2009-2017), pues según afirman, no sirvió para mejorar los derechos humanos en la Mayor de las Antillas.
La carta indica que en ningún momento durante la esa administración, en la cual el propio Biden fue vicepresidente, La Habana hizo esfuerzos para respetar la libertad de expresión o celebrar elecciones libres, entre otros reclamos.
Además asegura que excluir a las empresas de Estados Unidos de la lista de entidades restringidas de comerciar con empresas militares cubanas será visto como una recompensa al régimen por su opresión de los manifestantes pacíficos, incluyendo menores de edad y que esa iniciativa desmoralizaría a quienes continúan luchando por la libertad en la isla.
Los senadores firmantes recordaron a Biden que al inicio de su presidencia su administración anunció una política exterior centrada en la defensa de la democracia y la protección de los derechos humanos.
Además, enfatizaron en que a inicios de este mes de diciembre, el gobierno de Estados Unidos se comprometió a seguir responsabilizando a los funcionarios cubanos por la violencia contra protestas pacíficas.
Los tres republicanos aseguran en la misiva que el gobierno de La Habana patrocina además atentados terroristas contra los aliados de Estados Unidos y que ofrece refugio a personas incluidas en listas de organizaciones terroristas y a fugitivos responsables de la muerte de estadounidenses.
