Foto: The Guardian
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Clasificada el viernes como «una variante de preocupación» por la Organización Mundial de la Salud, Ómicron, identificada en Sudáfrica el miércoles, fue detectada ya en varios países de Europa y el primero fue Bélgica.
Este caso, se trata de una mujer no vacunada que viajó a Egipto y transitó por Turquía, y que dio positivo el lunes, confirmó el ministro de Asuntos Sociales y Salud Pública, Frank Vandenbroucke.
«La precaución es necesaria, pero que no cunda el pánico», dijo este ministro. Posteriormente, en Reino Unido, se detectaron dos casos de personas infectadas, explicó el Ministro de Salud, Sajid Javid. Los casos fueron identificados por la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido en Essex y Nottingham, Inglaterra.
Ambos están vinculados con viajes al sur de África y las personas, que están relacionadas, se han autoaislado junto con sus familias mientras se realizan más pruebas y rastreo de contactos.
Alemania, también, confirmó que dos pasajeros que aterrizaron el pasado 24 de noviembre en el aeropuerto de Múnich, procedentes de Sudáfrica, fueron infectados con la variante ómicron del coronavirus.
De hecho, ambas personas pidieron ser analizadas tras conocer la información sobre la nueva variante, por lo que el ministerio llamó a quienes hayan llegado en el mismo vuelo a suelo alemán ponerse en contacto con las autoridades sanitarias
Ómicron también se ha detectado en Botswana, Hong Kong, Israel, Italia, Países Bajos y la lista cada día parece extenderse.
Esto ha provocado que países de todo el mundo se han apresurado a introducir prohibiciones y restricciones de viaje a los países del sur de África en un esfuerzo por contener la propagación de ómicron.
En este sentido, Reino Unido ha puesto a 10 naciones en su lista roja de viajes, lo que significa que, a partir del domingo, todas las personas que lleguen desde esos lugares deberán hacer cuarentena en un hotel durante 10 días. Estados Unidos ha puesto también varias restricciones.
La OMS ha pedido a los países que mejoren sus esfuerzos de vigilancia y secuenciación para comprender mejor las variantes del coronavirus. Por su parte, los fabricantes de vacunas identificaron rápidamente la variante como una preocupación.
Moderna, refieriéndose a esta nueva cepa, dijo representa un «riesgo potencial significativo» para su vacuna contra el Covid-19.
«La variante ómicron descrita recientemente incluye mutaciones observadas en la variante delta que se cree que aumentan la transmisibilidad y mutaciones observadas en las variantes beta y delta que se cree que promueven el escape inmunológico. La combinación de mutaciones representa un riesgo potencial significativo para acelerar la disminución de inmunidad natural e inducida por vacunas», explicó.
Más allá de las implicaciones sanitarias, la nueva variante hizo que el petróleo se desplomara un 13% el viernes, pues los inversores temían nuevas restricciones gubernamentales y un crecimiento económico más lento. El crudo estadounidense terminó el día en un mínimo de dos meses de US$ 68,15 el barril, un 13,1% menos que el cierre del miércoles.
Los científicos trabajan intensamente para aprender más sobre la variante, los funcionarios de salud mundial están instando a las personas a usar mascarillas, evitar lugares concurridos y vacunarse si aún no lo han hecho. Ómicron es otro ejemplo de cómo el COVID-19 llegó para quedarse.
Por lo pronto, los científicos de BioNTech ya han comenzado a investigar el impacto que tiene la variante ómicron en su vacuna desarrollada con Pfizer, y se esperan datos de su efectividad para próximas semanas.