Foto: Kaloian Santos
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
El afamado trovador cubano Silvio Rodríguez cuestionó las sentencias a los manifestantes del 11 julio que protestaron en los barrios de la esquina de Toyo, en el municipio de Diez de Octubre, y en el reparto de La Güinera, en La Habana.
“Si cometieron los actos de violencia de que les acusa, de acuerdo en quesean juzgados y que les apliquen las penas correspondientes. Pero que yo sepa no mataron a nadie. ¿Condenas de 15, 20 y 30 años por desórdenes públicos? No me parece justo”, escribió el trovador en un post del sitio estatal Cubadebate, que publicó las condenas a los manifestantes.
“Tampoco se aclara la edad de los condenados. Con esto los enemigos de Cuba están haciendo zafra. No lo permitamos, siendo transparentes y rectificando lo que haya que rectificar”, indicó el trovador.
Las sentencias fueron divulgadas el miércoles y han despertado una ola de críticas en las redes sociales de los cubanos. El total de las sentencias llegó a 1.916 años de privación de libertad. La mayoría de los enjuiciados fueron condenados por delitos de hurto y sedición. Uno de los casos más criticados fue la condena impuesta al joven de 18 años Brandon Luis Becerra, a quien le impusieron 13 años de prisión. Entre los condenados se encuentran también personas que recibieron 20 y 30 años de cárcel.
Durante las manifestaciones de La Güinera murió, por disparos de la policía, el joven Diubis Laurencio Tejeda, la única muerte reportada en las protestas, según registros oficiales.
La información del Tribunal no hizo alusión a las edades de los condenados pero señaló que durante el proceso judicial se tuvo en cuenta “la gravedad, lesividad y violencia de los actos cometidos”, y que los “sucesos fueron deliberadamente organizados en medio de la situación compleja que atravesaba el país, como consecuencia de la pandemia de la Covid-19, en particular en la provincia de La Habana, razones por las que se habían tomado medidas excepcionales para contrarrestar sus efectos, que incluían, entre otras, la limitación de movimiento y el aislamiento social”.
Junto a Silvio Rodríguez cientos de cubanos han pedido que se revisen los procesos judiciales y las condenas, que muchos han coincidido en su enorme severidad.
Si el gobierno no se creyera tan perfecto y que tiene la razón absoluta, pudiera dialogar con la parte de la ciudadanía, que son bastante, que disienten del gobierno.
Son ciudadanos cubanos y tienen derechos contemplados en la constitución. No son criminales. Quieren ser escuchados y solo se les criminaliza. Así no funciona ninguna democracia. El absolutismo no es saludable para una sociedad que se dice justa.