Foto: RL Hevia
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
El Gobierno cubano subsidiará el 50 por ciento de los precios de venta de los materiales de construcción para las personas que se vieron afectadas tras el paso del Huracán Oscar por Guantánamo.
Solo en ese territorio se contabilizan afectaciones en 11 000 edificios entre viviendas e infraestructura pública y, en el caso del primero se reportan 257 derrumbes totales, 360 parciales y 9 198 casas perdieron parte de sus techos, entre otras averías.
Con el subsidio, publicado en Gaceta Oficial este jueves, también se tendrá en cuenta los precios de los colchones que se les vendan a los damnificados.
Por otra parte, las personas cuyos ingresos no resulten suficientes para adquirir los materiales o colchones, pueden acceder a créditos bancarios con el objetivo de solicitar los subsidios.
El Acuerdo dispone que el Ministerio de Finanzas y Precios conceda garantías que respalden los créditos bancarios irrecuperables otorgados a los damnificados, un aspecto lógico si se tiene en cuenta que la mayoría de los afectados no tiene los recursos financieros para pagar dichos créditos.
El Estado financiará el diferencial de la tasa de interés, por encima del 2.5 % anual, de los créditos que soliciten los damnificados para acciones constructivas, por haber sufrido derrumbes totales o parciales de viviendas y techos, así como con destino a la compra de bienes duraderos.
De igual forma, se otorgarán bonificaciones a los precios y tarifas de los servicios y productos de uso duraderos – que incluye los colchones– que se comercialicen a las personas damnificadas, aunque saltan las dudas sobre la verdadera disponibilidad de estos productos ante las carencias y limitaciones que vive la Isla.
El huracán Oscar tocó tierra cubana como categoría 1 en la escala Saffir-Simpson y, a la fecha, se contabilizan ocho fallecidos y dos personas continúan desaparecidas.
Las mayores afectaciones por este evento meteorológico se concentran en los municipios de Imías y San Antonio del Sur, donde sus pobladores expresaron el abandono por parte de las autoridades en medio de las grandes inundaciones, los deslaves y los derrumbes en las principales carreteras que comunican estas localidades.