Texto: Viviana Díaz
La portavoz de la actual administración estadounidense, Jen Psaki, anunció que el gobierno de Joe Biden revisará la política de ese país hacia Cuba, sobre todo luego de las últimas acciones tomadas durante el mandato de Donald Trump.
En conferencia de prensa, Psaki dio a entender que la intención es revertir las directivas lanzadas por el inquilino anterior de la Casa Blanca, debido a las que se suspendió el arribo de cruceros de estadounidenses a la isla y se afectó el envío de remesas a familiares con el cierre de Western Union, por solo citar algunas de las consecuencias.
“Nuestra política hacia Cuba se orienta por dos principios. Primero, el apoyo a la democracia y derechos humanos, en lo cual se concentra el centro de nuestros esfuerzos. Lo segundo, son los estadounidenses, especialmente los cubanoamericanos, que son los mejores embajadores de la libertad en Cuba, así que vamos a revisar las políticas de la Administración Trump”, aseguró la funcionaria.
Esto no es extraño para muchos, teniendo en cuenta que Biden era el vicepresidente de Barack Obama cuando este protagonizó uno de los momentos claves en la distensión entre Cuba y Estados Unidos.
Desde su campaña electoral, el 46 presidente de la nación norteña dejaba entrever su intención de retomar la política de Obama hacia Cuba, postura compartida en el partido demócrata al que forma parte.
Queda ver en el futuro en qué acciones se traducen estas palabras. Por lo pronto, lo más probable es que se regularicen los vuelos y el arribo de cruceros, siempre que la situación epidemiológica de la COVID 19 lo permita.
Igualmente, se espera una normalización en el envío de remesas desde Estados Unidos a Cuba, con un posible reinicio de operaciones de la Western Union, cuyos directivos ya han manifestado su disposición a retomar su trabajo en Cuba.
