Foto: El Periódico
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Manuel Fraga Iribarne, el “Carnicero de Madrid” fue investido con la distinción de Doctor Honoris Causa en Ciencias Filosóficas por la Universidad de Oriente.
El centro de altos estudios publicó en sus redes sociales una recordación del acontecimiento que tuvo lugar en 1998 y en el que además, reconocían su desempeño. La publicación se llenó de respuestas críticas con respecto al hecho y subrayando la conocida trayectoria de apoyo al franquismo que mantuvo Iribarne durante su período en la alcaldía de Madrid en los años en que España era dominada por el dictador Franco.
“No bastó con la humillación de entregar tal condición, encima lo celebran”, destacaba un usuario. Mientras que en otro comentario se leía: “El hombre que negó el Holocausto y se dedicó a presionar para que se liberara a su amigo Rudolf Hess, Ministro de Gobernación (o sea de la represión) del franquismo…”
A Fraga Iribarne se le adjudica la responsabilidad de buena parte de los muertos diarios que aparecían desperdigados por las cunetas de Madrid durante su período de gobernación, unos 4300 se presume, así como la persecución y también el asesinato de cientos de comunistas y cualquier persona que se pusiera en contra del sistema fascista.
Una de las más famosas frases de Iribarne fue la de “La Calle es mía”, a propósito de la prohibición de todo acto o posibilidad de manifestación en la vía pública. Gracias a este precedente y amparados en la Ley de Memoria Histórica en abril de 2017 retiraron una estatua del nombrado Doctor Honoris Causa de las calles de Málaga y la devolvieron a su escultor.
Sin embargo, no ha sido únicamente la Universidad de Oriente la que le otorgara esta distinción. También los centros de altos estudios de Lisboa y de la ciudad mexicana de Puebla, entre otras, le confirieron tal investidura por sus méritos académicos y su trayectoria como político. Mantuvo un fuerte vínculo con varios países de América Latina, sobre todo con Cuba, de donde procedían sus padres y donde vivió en algunos años de su vida. Sobre Fidel Castro sentenció en una ocasión: “Más allá de las diferencias ideológicas, y nunca lo hemos negado, Fidel Castro es un símbolo de este mundo hispánico”.
