Foto: RTVE
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Emmanuel Macron, presidente de la República Francesa, ofreció recientes declaraciones al diario Le Parisien que han acaparado titulares en los medios nacionales e internacionales de mayor relevancia, desatando así una avalancha de comentarios de usuarios de todo el mundo y dejando a su paso un país más dividido.
Mientras hacía referencia a las medidas que tomaría el gobierno francés ante la avalancha de casos impulsados por la variante ómicron, el mandatario dejó escapar sus deseos personales para aquellos que aún no han recibido las dosis necesarias de las vacunas para hacer frente al Covid-19, los cuales calificó como “la estrategia”. “Tengo muchas ganas de fastidiar a los no vacunados” fueron las palabras de Macron, que pudieran tener consecuencias para su futuro inmediato en la política, teniendo en cuenta el escenario de campaña electoral en el que se encuentra inmerso. Y aunque muchos ya dan por hecha su reelección, el movimiento antivacunas ha arremetido en su contra.
Actualmente unos cinco millones de franceses no se han puesto ninguna dosis de las vacunas contra la COVID-19. La nación, que enfrenta la quinta ola de contagios, como otros países ha optado por pasaporte sanitario, el cual se hará más restrictivo en las próximas semanas, según también informara el presidente francés. Una de las propuestas de Macron -proyecto de ley que debe ser aprobado por el Parlamento- consiste en que los mayores de 12 años sin vacunar no puedan ir a restaurantes, bares, museos, gimnasios, cines ni usar determinados medios de transporte, así presenten una prueba de diagnóstico negativo de menos de 24 horas.
A tres meses de las elecciones presidenciales, ¿estaría Macron enviando un mensaje de carácter sanitario-social o también político?
