Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Hugo León
Debido a una nueva normativa del Ministerio del Comercio Interior (Mincin), los cubanos que viajen al extranjero y permanezcan fuera del país por más de dos meses, deberán darse de baja de la libreta de racionamiento.
Se trata de la Resolución 101/2023, publicada en la Gaceta Oficial de la República esta semana que “establece las normas para la inscripción de consumidores y núcleos en el Registro de Consumidores, como el otorgamiento de la libreta de control de ventas de productos alimenticios normados para la población”.
A diferencia de otros, este procedimiento entró en vigor desde su publicación, explicó el Mincin en sus redes sociales. Además, es de aplicación para las personas naturales cubanas con domicilio permanente en el país y para los extranjeros con residencia permanente en el territorio nacional.
El texto incluye a quienes “salen al exterior del territorio nacional con carácter temporal superior a dos meses, por motivos de trabajo, estudio, cooperación o asuntos particulares.”
Igualmente explica que la baja se deberá tramitar antes de efectuar la salida del país, lo cual se sumaría a los trámites que deben realizar los viajeros en poco tiempo. Asimismo, esas personas tendrán que volver a inscribirse en el registro de consumidores al regresar a la isla, para poder recibir la cuota nuevamente.
La Resolución detalla que también es obligatoria la gestión de baja de la libreta antes del ingreso a instituciones como hogares de ancianos ya sea de manera transitoria o permanente.
Por otro lado, para los fallecidos, la cancelación en la libreta debe procesarse en un máximo de 15 días hábiles tras el deceso, y en caso de encarcelamiento, dentro de los primeros 10 días hábiles después de cumplir los tres meses de reclusión.
Esta norma llega en un contexto de escasez en Cuba y de intermitencia en la entrega de los productos normados en la libreta de abastecimiento. Las demoras han afectado durante meses el café, los cigarros, el azúcar y el arroz.
También los cárnicos como el pollo y la carne de res para niños y personas con dieta médica han tenido inestabilidad, de acuerdo con las autoridades del Mincin.
Por otro lado, este es un contexto marcado por la crisis migratoria, con más de 300 mil de cubanos que se han marchado apenas en los últimos tres años, y poco se sabe cuántos de ellos lo hicieron sin declararlo, por lo que el Estado está entregando productos a nombre de personas que ya no viven en Cuba.
