Foto: RRSS
Texto: Hugo León
No basta con que los cubanos no puedan ver la mitad de los juegos de pelota de la isla por los apagones, ni que en la mayoría de las provincias nada más pueda jugarse de día porque no hay luz tampoco en los estadios… la situación es todavía peor en algunos territorios, como Holguín, donde para colmo de males la instalación también tiene partes a las que no puede acceder el público.
Como lo leen, del estadio Mayor General Calixto García Iñiguez, de Holguín, apenas funciona una parte, porque otra porción del sitio no es accesible actualmente por peligro de derrumbe.
Según denuncias de varios seguidores del deporte nacional cubano, el acceso al gradería del lateral izquierdo está cerrado porque el andamiaje de las torres de luces está en estado de derrumbe.
“Las puertas de la parte izquierda se mantuvieron cerradas y se van a mantener así pues el andamiaje de las torres del lateral izquierdo han sido declarados en estado de derrumbe”, han indicado comunicadores cubanos y medios no estatales.
A juzgar por el periodista Ernesto A. Jomarrón, “los años y el poco mantenimiento dado a las torres de la joya arquitectónica le están pasando factura”.
La banda de primera será la única recibiendo público hasta que se retiren los andamios y no exista riesgo para los visitantes al estadio.
En consecuencia, resalta un comunicado de un grupo de Facebook de aficionados holguineros, el equipo “home club” jugará sin público por encima de su dugout.
De acuerdo con fuentes oficiales, la decisión de cerrar la parte izquierda de la instalación deportiva no es porque el techo o las paredes estén en mal estado, sino por la situación del andamiaje de las torres del iluminación.
“En un primer momento se decidió retirar dichas luminarias para quitarle peso a estos equipos e impedir que se vinieran abajo, ahora como método profiláctico se decidió no recibir público por esta banda para proteger a los aficionados”, dijo a la prensa estatal el director del estadio, Alejandro Vidal Hechavarría.
Para evitar un accidente, esos elementos serán desmontados cuanto antes, se explicó. Además, de acuerdo con la directiva de la instalación, las máximas autoridades de la provincia están al tanto del proyecto y están brindando el apoyo posible.
El estadio tiene 45 años de fundado y acoge juegos de la Serie Nacional de Béisbol y de otras ligas, además de eventos de diverso tipo. Su capacidad es de hasta 30 mil personas, y es considerado frecuentemente como una joya arquitectónica de la provincia.
