Texto: Jorge Suñol
En el 2020 se han detenido muchísimos proyectos producto a la situación impuesta por la COVID-19. Sin embargo, para enfrentar la crisis sanitaria y evitar la propagación del nuevo coronavirus, científicos del mundo no han parado de trabajar en su misión de crear equipos o máquinas con tecnología avanzada para la desinfección de calles, mercados, avenidas, incluso hasta de billetes; la mayoría con un porcentaje alto de efectividad.
En este sentido, sobresalen varios ejemplos por todo el mundo. Países como China, España y gran parte de Latinoamérica llevan la delantera. En una búsqueda informativa por varios canales digitales, aparece Zippedi, el robot chileno que pasó de hacer inventarios a sanitizar supermercados.
Dicha máquina fue desarrollada en Chile por ingenieros de la Universidad Católica, dirigidos por Álvaro Soto, profesor de Ingeniería de este centro y considerado el «padre» del invento. Pero Zipeedi surgió antes de la pandemia, el androide recorría los pasillos de los mercados captando información para generar informes de chequeo, orden de productos y etiquetados.
Pero al llegar la COVID-19, el equipo de científicos cambió las funciones de este robot y lo programó para emitir rayos UV-C o radiación ultravioleta, la misma que ha demostrado ser efectiva contra virus similares al SARS-CoV-2. La tecnología del dispositivo autónomo cuenta con un sistema de navegación y reconocimiento de objetos, y también un sistema de seguridad que evita cualquier contacto humano durante la aplicación de radiación UV-C.
Por otra parte, se encuentra Cholo Clean, un vehículo tipo camión, creado por el ingeniero de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) de Perú, Armando Díaz Muñoz, quien junto a su equipo llevó a cabo el proyecto con el objetivo de recoger los desechos sólidos, barrer y desinfectar las avenidas y calles.
En un principio, fue pensado para el traslado de materiales en el sector minero y construcción, pero a raíz del nuevo coronavirus, se tuvo que adaptar y cambiar su aplicación. El propósito es que los grandes camiones de basura ya no ingresen a las zonas residenciales por ser muy contaminantes, sino que los desechos sean recogidos por estos equipos motorizados autocargadores.
Cholo Clean tiene una velocidad de 7 km/hora promedio y un motor de 20 hp. Se proyecta que sea un vehículo eléctrico. Además, tiene un sistema hidráulico con unos pistones que hacen girar una escobilla circular, la cual sirve para barrer las calles, y, finalmente, cuenta con un sistema de desinfección.
En España, por ejemplo, se registra Cleands, la primera pulsera de diseño, dispensadora y rellenable de gel hidroalcohólico, capaz de suministrar en una sola carga, las dosis necesarias para cubrir los 20-25 lavados de manos recomendados al día.
Resultado del ingenio y creatividad de los jóvenes emprendedores españoles, Arturo Santamaría y Álvaro Vázquez, inicialmente la pulsera se inspiró en las necesidades del sector servicios, pero se dieron cuenta de que ante la insostenible situación, era un producto necesario y útil para cualquier persona.
Con el dispensador la importancia de lavarse las manos está más presente y, al resultar tan sencillo, se practica más. Sólo hay que apretar el dosificador y frotarse las manos. Disponible en seis colores (negro, blanco, rosa, amarillo, azul y verde), además de su atractivo diseño, es ligero y compacto.
Y en República Dominicana, el Banco Central adquirió un equipo de alta tecnología para la desinfección de los billetes puestos a disposición del público en el país. El funcionamiento se basa en intensidad lumínica, a través de rayos ultravioleta tipo C, la cual ha demostrado tener una alta efectividad en la destrucción de material genético radicado en microorganismos como virus y bacterias impidiendo su replicación.
Este equipo de alta tecnología, de la que China es pionera, posee un alta potencia y desactiva el virus en aproximadamente cuatro segundos, sin embargo, el fabricante recomienda que la desinfección se realice a la mitad o una tercera parte de la potencia, con lo cual se eliminaría en alrededor de 8 a 12 segundos, según confirman fuentes del Banco Central de República Dominicana.
Estos no son los únicos ejemplos innovadores creados para la desinfección de espacios u objetos. La tecnología no se detiene, y cada vez se reinventa maneras más avanzadas para evitar la propagación de la pandemia, que ha dejado más de un millón de muertes por todo el mundo.
