Foto: RRSS
Texto: Hugo León
El luto que envolvió a Cuba los últimos días de la semana pasada tras conocerse el asesinato de una familia matancera por otro ciudadano cubano, escaló rápidamente y se convirtió en desprecio sobre la vida del agresor y en duros comentarios en redes sociales hacia el criminal.
La comunidad cubana fue informada de que el presunto asesino fue detenido cuando intentaba salir ilegalmente del país y luego de esto, durante todo el fin de semana las redes sociales se convirtieron en un hervidero de mensajes pidiendo la más fuerte de las condenas para él: la pena de muerte.
En Facebook e incluso en grupos de Telegram asociados a medios estatales como “Debate en Cuba”, del sitio oficial Cubadebate, se pueden leer cientos de mensajes referidos al mencionado tema.
Los comentarios, varios de los cuales debieron ser moderados por administradores del chat por su rudeza, indican que el asesino, que mató a una familia completa (una pareja y su hijo menor de edad), no tiene perdón de la sociedad y que el Estado debe hacerle pagar con su vida por las tres que tomó.
El pedido de “paredón” casi unánime, señala que quien no respeta la vida no tiene derecho a que se respete la suya y que sólo aplicando la pena de muerte se dará el ejemplo debido a los malhechores del país, en medio del incremento de la violencia en la isla.
Otros internautas se han preguntado por qué la ley cubana es permisiva con estos actos y hasta cuándo será así. Consideran también que el Estado debe darse cuenta de que los robos y en general la criminalidad han escalado en los últimos meses.
Aunque algunos mensajes son más radicales y piden también un juicio televisado, hay quienes defienden la idea de que esto sería demasiado y que de hecho, pedir la pena de muerte es abusivo y que enlutaría a otra familia cubana: la del acusado.
Entretanto, varios argumentan que la pena de muerte a la persona en cuestión lo eximiría de sufrir las consecuencias del crimen que cometió, mientras que la cadena perpetua sería un castigo más recio.
Pena de muerte en Cuba
Las últimas ejecuciones en Cuba ocurrieron en 2003 contra un grupo de cubanos que secuestraron una lancha, aunque no provocaron la muerte de ninguno de los ocupantes.
Durante el período republicano (1902 a 1958), la pena de muerte fue objeto de discusión en varios momentos. Antes de aprobarse la Constitución de 1901 y luego de dos votaciones se llegó a la decisión de aprobarla, pero estaba prohibida para los delitos de índole político.
La Constitución de 1940 la abolió completamente, con contadas excepciones como el delito de carácter militar o culpables de espionaje en favor del enemigo en tiempo de guerra, así como los encontrados culpables de traición.
El gobierno revolucionario hizo serios cambios y amplió la pena de muerte, condena que aplicó con severidad en los primeros momentos tras llegar al poder por cuestiones políticas.
Ahora, con el Código Penal vigente, el número de delitos a los que puede aplicárseles la pena capital como castigo son 24, cuatro más que en el texto anterior y los cuatro delitos añadidos son contra la seguridad del Estado.
De los 24, más de la mitad son delitos de naturaleza política, llamados por el gobierno “sedición” o “contra la seguridad del Estado”, y contemplan condenas de prisión o la pena capital.
merece la pena de muerte un criminal no puede estar en la calle