Fotos: Jorge Luis Borges
Texto: Hugo León
Cada diciembre, los días 16 y 17 se visten de morado a lo largo y ancho de la isla por una razón especial: los cubanos celebran su devoción a San Lázaro, uno de los santos más venerados del país.
En esta ocasión, pese a los anuncios de lluvia y mal clima en la capital, miles de personas se dirigieron el sábado al Santuario Nacional de El Rincón, en la tradicional peregrinación hasta el lugar de veneración del santo, en las afueras de la ciudad.
Cuba Noticias 360 conversó con dos peregrinos que llegaron hasta el lugar, quienes llamaron la atención sobre la cantidad de personas que habían visto en El Rincón y sus alrededores.
Uno de ellos, habanero, aseguró que va cada año en esta fecha hace más de una década y que en esta ocasión notó a menos personas que en otras oportunidades. Además, mencionó que no hubo un refuerzo con guaguas como otras veces y que el dispositivo de seguridad era bastante fuerte, con decenas de policías en el sitio.
Según explicó el transporte es un reto y también se temía que el tiempo fuera muy lluvioso, algo que a su parecer influyó. No obstante, comentó que reconoció a varios fieles quienes van cumpliendo promesas desde hace años como él, pues los ha visto otras veces. “El cura agradeció a todos los que habían llegado pese a la lluvia y las dificultades con la movilidad”, dijo a este medio.
Por su parte, una segunda peregrina que llegó al Rincón desde Santa Clara expresó convencida que “no es lo mismo poner la velita en su casa que frente al altar”, porque cuando ella rezó al santo, él le “respondió” y ahora ella mantiene su palabra.
Incluso si se ven menos personas en la víspera del día 17, puede ser porque muchos más fueron a lo largo del 16 o están esperando al domingo para asistir a la iglesia, y es válido igualmente, consideró.
Devoción a San Lázaro en Cuba
La devoción por San Lázaro en Cuba es sólo comparable y superada por la veneración del pueblo hacia la Virgen de la Caridad, patrona del país. Detrás de este extendido culto hay siglos de entronización de las religiones católica y yoruba en la Mayor de las Antillas, donde el colonialismo español y los esclavos africanos echaron profundas raíces que todavía perduran.
Es así que por estas fechas se vuelve común observar en las calles de la isla a los llamados “pagadores de promesas”, recorriendo las principales arterias de las ciudades vestidos con prendas de saco y adornos morados, el color atribuido a San Lázaro.
Algunos de ellos portan alcancías en las cuales los transeúntes dejan dinero que luego llegará hasta el Santuario de El Rincón, y otros incluso arrastran pesadas piedras por la vía, sin más ayuda que sus propias fuerzas, hasta llegar a la iglesia.
Cada año la peregrinación hasta la iglesia del Rincón acoge a miles e incluso decenas de miles de personas, por lo cual las autoridades de La Habana suspenden el tránsito de vehículos en las carreteras de acceso al lugar y se dispone de refuerzos de ómnibus los días 16 y 17 de diciembre.
No es sólo en Cuba o en el Rincón donde se celebra la fecha de San Lázaro. Miles de cubanos emigrados también aprovechan la oportunidad para rendirle tributo desde sus lugares de residencia actual, y en redes sociales se pueden contar por miles las publicaciones relacionadas con la fecha.
