Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: RL Hevia
La pelota vive y respira en Cuba pese a los infinitos problemas que golpean al deporte nacional. Para muestra, la final del Torneo de Clubes Campeones, que vivió este sábado, en un recóndito municipio de Matanzas, sus primeras dos escaramuzas ante la mirada atenta de toda la afición beisbolera de la isla.
Porque aunque las novenas de Unión de Reyes y Trinidad no representen mucho para la gran mayoría de los fanáticos, las expectativas por conocer el nuevo campeón de este redimido certamen se han disparado por las nubes. Incluso, hasta el estadio “16 de abril” se llegó la plana mayor de la Comisión Nacional, encabezada por su mandamás Juan Reinaldo Pardo.
Y el espectáculo sobre la grama no decepcionó a ninguno de los cientos de aficionados que abarrotaron la pequeña instalación, o que siguieron por la radio los dos partidos correspondientes a la jornada sabatina. El desenlace, con una victoria por bando, no fue el deseado para los yumurinos dueños de cada, pero dejó la mesa servida para un duelo de rompecorazones en la mañana del domingo.
División de honores en la primera fecha de la gran final del Torneo de Clubes Campeones del #BeisbolCubano 2024. Será mañana cuando se conozca el ganador entre Unión de Reyes (Matanzas) y Trinidad (Sancti Spíritus). #Cuba #Beisbol pic.twitter.com/MCbSnTew66
— Federación Cubana de Béisbol (@CubanaBeisbol) February 17, 2024
A primera hora, los anfitriones dirigidos por Saúl Vasallo no creyeron en el pedigrí con el que aterrizo el abridor trinitario Ariel Zerquera, quien en las fases previas llegó a propinar hasta un juego sin hits ni carreras.
En la misma primera entrada, la “locomotora unionense” cayó sobre los envíos del zurdo espirituano y lo hizo saltar del box para encaminar el éxito inicial de 6-1, que tuvo en la colina contraria al derecho Andy Quesada en excelente forma.
Sin embargo, los Tiburones del mánager Osmany Rodríguez no tiraron la toalla ante el primer revés y salieron en busca del triunfo que los mantuviera con vida. Partido de infarto, donde a dos outs de la victoria, Trinidad vio como un cuadrangular empataba el choque y lo mandaba a extrainnings.
Por suerte para los espirituanos, su cerrador estrella, Yanielquis Duardo, el mejor relevista de la pasada Serie Nacional, supo contener los bates rivales, hasta que pudieron sellar la agónica sonrisa por 4-3 para emparejar la final. Para mañana, eso sí, el nombre de Eduardo Parreira, autor de dos cuadrangulares en la jornada, no se les debe olvidar jamás.
Precisamente, este domingo Trinidad volverá a mandar a la lomita de los suspiros a Zerquera, su principal carta, que al apenas haber trabajado en su fallida apertura del sábado, tendrá una nueva oportunidad para redimirse y guiar a los suyos por vez primera al título en este tipo de lides. Por Unión de Reyes, todavía se desconoce quién será el elegido para lanzar las serpentinas.
De cualquier manera, uno de los dos conjuntos se convertirá en el monarca de la edición 18 de estos torneos surgidos en el año 1992 y que enfrentan en series de eliminación directa a los titulares de cada serie provincial.
Después de un parón de 16 años desde 2008, cuando un elenco de Guantánamo se alzó con la corona, las autoridades deportivas de la isla decidieron rescatar este evento popular que hasta el momento ha demostrado haber sido un acierto total.
