El SOS de los cubanos desde Welcome Connect

Foto: Cuba Noticias 360

Texto: Hugo León

Según datos oficiales, más de 55 mil cubanos han recibido el parole humanitario y viajado a Estados Unidos, y en Cuba, -y esto es todavía más impresionante- hay más de 300 mil personas a la espera de la revisión y aprobación de su trámite.

Las cifras despejan cualquier duda sobre el enorme interés que genera esa iniciativa de emigración legal y segura hacia los Estados Unidos, y hablan también de la demora de meses del proceso en miles de casos que esperan desde los primeros días.

Algo que se menciona poco, sin embargo, es la situación de quienes quieren emigrar y no tienen para pagar el viaje cruzando fronteras a través de Centroamérica, ni quien actúe como su beneficiario en EEUU para ponerle el parole aunque prefieran emigrar legalmente.

Para ellos se han creado algunas alternativas oficiales y otras privadas con el objetivo de buscar un patrocinador, como Welcome Connect, que pese a algunos problemas con las inscripciones, es una de las más conocidas y en las cuales miles de cubanos tienen puestas sus esperanzas.

Los pedidos de ayuda son muchos y muy variados, y a esta redacción han llegado decenas de ellos que describen escenarios de vida complejos en la isla, donde la situación económica y social atraviesa momentos difíciles, comparables con los vividos durante los años 90.

Cuba Noticias 360 informó hace meses que Welcome Connect volvía a aceptar solicitudes pero los comentarios no se han detenido. Uno de los últimos recibidos, de la lectora Isis Sagó, pide ayuda alegando que su salud “se está deteriorando cada día más” y que no tiene “la alimentación necesaria para continuar”.

Su hijo, asegura, lleva 14 años preso y pese a su estado actual no se le ha conmutado la pena. También, al darse a conocer que ONG’s o iglesias podrían actuar como patrocinadores, la misma persona indicó que necesitaba ayuda para poder operarse de una colonoscopía y que su situación económica no le permitía costearse las bolsas necesarias para su condición.

Una situación parecida narró Yahima Cosme, de 42 años, con un hijo de 13 que tiene un leve retraso mental. Ella pidió la ayuda de las iglesias para encontrar patrocinador y así poder darle una mejor calidad de vida y mejor educación a su hijo “y sobre todo un tratamiento médico digno”.

Los suyos son sólo algunos de los casos que mencionan la necesidad de patrocinador para viajar por temas médicos o económicos.

También hay quienes centran su preocupación en sus hijos y buscan la oportunidad de que estos viajen para culminar sus estudios en EEUU y trabajar dignamente. Otros, sin dar muchos detalles, aseguran que no han tenido éxito con la plataforma y no pocos piden ayuda para que algún “ángel” se apiade y ponga el patrocinio.

Igualmente se cuentan por varios los profesionales, entre ellos médicos, maestros e ingenieros que buscan viajar a Estados Unidos para “realizarse profesionalmente”.

Las razones son muchas pero un tema es recurrente: la situación del país. “Mejorar la calidad de vida”, “salir adelante”, “SOS urgente”, son frases comunes que por repetidas no deben hacer perder la noción de su significado.