Texto: Darcy Borrero
Si tienes un Cadillac Escalade, un Chevrolet Suburban, un Chevrolet Tahoe o un GMC Yukon del 2007 al 2014, no te alarmes, pero infórmate. Lo mismo si tienes camionetas pickup Chevrolet Silverado o GMC Sierra. Y, si ni siquiera tienes automóvil, igual infórmate porque alguien cercano a ti probablemente tenga y le afecte o salve la retirada masiva que hará General Motors de modelos con detalles defectuosos.
Entre seis y siete millones de automóviles, en particular camionetas pickup y SUV grandes, serán retirados del mercado en todo el mundo con el objetivo de reemplazar los potencialmente peligrosos infladores de bolsas de aire Takata.
General Motors lo hará, según un comunicado de la empresa emitido el lunes, luego de que el gobierno de EE. UU. diera la orden de retirar 6 millones de vehículos en el territorio nacional.
El fabricante de automóviles con un defecto que ha provocado la muerte al menos a 27 personas en todo el mundo, incluidas 18 en los EE. UU., dice que no combatirá la decisión, aunque mantiene la postura de que los vehículos son seguros.
Los muertos y los cientos de heridos que han dejado los infladores de bolsas de aire Takata, de todas formas, se hacen con la razón tras cuatro años de negativa por parte de GM. Los propietarios se quejaron ante la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) de que la empresa estaba anteponiendo las ganancias a la seguridad.
No obstante, se calcula la pérdida para la compañía en $1.2 billones, aproximadamente un tercio de sus ingresos netos en lo que va de 2020.
La NHTSA concluyó que los infladores GM, al igual que otros Takata anteriormente retirados del mercado, están en riesgo de sufrir el mismo tipo de explosión después de una exposición prolongada a altas temperaturas y humedad.
Sucede que las bolsas de aire defectuosas producidas por el proveedor Takata podrían secarse y, su despliegue en un choque, provocaría una emisión de fragmentos de metal como metralla directo al rostro y al pecho de las víctimas.
Las alarmas venían sonando desde hace algunos años para la industria, con el retiro de automóviles más grande de la historia: Nissan, Toyota y Honda, casi se vaciaron, mientras Takata quebró. Fueron miles de millones destinados a reparaciones.
“Se están retirando del mercado decenas de millones de vehículos con bolsas de aire Takata. La exposición prolongada a altas temperaturas y humedad puede hacer que estas bolsas de aire exploten cuando se despliegan. Tales explosiones han causado heridos y muertos”, se lee en el portal de la NHTSA, que además insta a los propietarios de vehículos a que tomen algunas medidas simples para protegerse a sí mismos y a los demás de esta grave amenaza a la seguridad.
“Un grupo separado de bolsas de aire Takata defectuosas fue retirado del mercado a finales de 2019. A diferencia de los infladores de bolsas de aire en los retiros del mercado de Takata más grandes, este retiro involucra infladores de conductor sin azida. El defecto en los infladores NADI puede provocar que la bolsa de aire explote o se infle insuficientemente durante el despliegue”, concluye la agencia gubernamental mientras da pruebas de antecedentes.
