Foto: Habana D’ Primera | Facebook
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
El reconocido percusionista cubano Jesús María Abreu Hernández, último de los fundadores vivos de Los Papines, falleció este sábado en Canarias, España.
Con 78 años de edad, el artista fue desde joven uno de los mayores defensores de la rumba cubana junto a sus hermanos, motivo que los llevó a crear la mítica y popular agrupación rumbera.
Desde las redes sociales, muchos admiradores, artistas e instituciones has comentado la triste noticia, una gran pérdida sin dudas para la cultura de la isla.
Así lo reflejaba la investigadora cubana Rosa Marquetti: “Hace pocas horas, en Tenerife, Islas Canarias, se ha apagado el último bastión fundador de una dinastía rumbera. Ha muerto Jesús Abreu, el menor y único sobreviviente de los legendarios hermanos Abreu: Los Papines, toda una institución en la música popular cubana”.
Marquetti envió además un abrazo a su hija Yuliet Abreu, La Papina de Cuba, también miembro de la agrupación y “que ha sabido y sabrá, junto a su pequeño hijo, continuar la tradición familiar”, añadió.
Por último, la especialista en música cubana comentó: “Lejos estaba de saber que la grabación del disco ‘Celia, Cuba te da las gracias’, dedicado a nuestra Celia Cruz, sería el último trabajo discográfico de su padre, esta vez junto a ella y a su nieto. Mis condolencias para Yuliet, para toda la familia Abreu, y para la familia rumbera en Cuba y el Caribe”.
Los inicios en el arte de Jesús Abreu fueron junto a diversas agrupaciones, con las cuales logró subir a los escenarios más importantes del país en esos momentos como los cabarets Parisien y Tropicana.
Los Papines fue sin dudas su obra cumbre, acompañado de sus hermanos Luis, Alfredo y Ricardo. La agrupación, creada a inicios de los 60’, se convirtió rápidamente en un referente de la percusión afrocubana y afrocaribeña, tanto en Cuba como en el exterior.
De la mano de su labor en la música, Abreu estuvo vinculado a la enseñanza artística, ejerciendo como profesor en la Escuela Nacional de Arte (ENA). Además, estuvo al frente de la nueva generación de Los Papines, impulsando a muchos jóvenes en la defensa del género y para mantener el legado de la popular agrupación.
La discografía de Los Papines reúne títulos como ‘Nunca es tarde si la rumba es buena’, ‘Los Papines siguen OK’, así como el conocido ‘Concierto en el Lincoln Center’ de EE.UU, donde se unieron a la Orquesta Aragón y la cantante Elena Burke.
Asimismo, el fonograma “La rumba soy yo” obtuvo en 2001 el Grammy Latino en la categoría de música folclórica, un disco que reúne a las más grandes estrellas de la rumba en Cuba.
