Foto: Europa Press
Texto: Hugo León
Varios peloteros cubanos afiliados a equipos de la Major League Baseball (MLB) y otras ligas foráneas han dado el sí para unirse al equipo Cuba que participará en el Clásico Mundial de Béisbol de 2023.
La decisión de los jugadores ocurre en medio de la polémica por el surgimiento de la Asociación de Peloteros Cubanos Profesionales, que agrupa a grandes estrellas de la pelota y prestigiosos ex jugadores, que intentaron formar su propia novena independiente para participar en el Mundial, iniciativa que a la postre fue desestimada.
¿Quiénes son los jugadores que podrían estar en el equipo Cuba?
Andy Ibáñez, Yoan López y Elián Leyva fueron los primeros en darse a conocer en este sentido. Los tres tienen contratos profesionales fuera de Cuba y no tienen relación laboral con la isla.
Además de ellos, en los últimos días otros nombres de sumaron a la lista: el zurdo guantanamero Roenis Elías, ex Grandes Ligas y actualmente jugador de la Liga Dominicana; también Josuán Hernández, Yoan Moncada y Luis Robert.
Tal vez los anteriormente mencionados no ocupen tanta prensa como el astro Yuli Gurriel, Chapman o José Dariel Abreu, pero son un refuerzo significativo para la escuadra cubana y jugadores de impacto en sus respectivos planteles, baste mirar el salario de varios de ellos, por encima de los 10 millones al año.
Otro peso pesado del béisbol dijo sí al llamado de Cuba: Yoenis Céspedes, informó la Federación Cubana de Béisbol, al igual que Onelkis García podría llegar a la preselección.
¿Se podía o no se podía convocar a los peloteros?
El Clásico lleva funcionando 16 años como competencia y desde sus inicios una interrogante que existió fue por qué Cuba no convocaba a sus peloteros de Grandes Ligas .
No eran pocos los nombres de peloteros estelares que podían haber dicho sí al llamado, como Kendry Morales, Orlando «El Duque» Hernández, José Ariel Contreras, Liván Hernández y otros.
Con el paso de los años y de los Mundiales, la lista de cubanos jugando en líneas extranjeras aumentó y en apartados como el pitcheo se pudo contar con Chapman, José Delfín Fernández (fallecido en plena juventud), Contreras, Yuniesky Maya… nombres que hubieran aportado mucho a las opciones de Cuba para aspirar por el título, que comenzó a quedar cada vez más lejano.
De acuerdo con la Federación Cubana de Béisbol, la MLB no permitía que la isla accediera a los cubanos para que jugaran por su país.
El discurso de las autoridades también se sostenía sobre la retórica de «los leales» contra los «traidores» siendo los últimos aquellos que se habían ido de Cuba por diversas vías buscando un futuro mejor para su economía y sus carreras deportivas. Solo los «leales», los que se quedaron en Cuba jugando la Serie Nacional, podían llevar el uniforme de las cuatro letras a competencias internacionales.
No obstante, no se tienen noticias de que la MLB haya sacado nuevas normativas para los jugadores que deseen asisitir a las selecciones nacionales, y sí se ha hablado de varios cubanos llamados para la preselección de la isla.
Tras la muerte de Higinio Vélez, amado pero también criticado por doquier presidente de la Federación Cubana de Béisbol, hubo un lapso de tiempo con esa plaza vacante y luego se designó a Juan Reinaldo Pérez Pardo, quien cambió un poco la tónica del discurso.
Ahora que quedó visto que los ligamayoristas sí pueden ser convocados para el equipo Cuba, existe otro contratiempo para los que ha llamado a las autoridades cubanas o han respondido afirmativamente al pedido: la Asociación de Peloteros anteriormente mencionada separó a quienes dieron el sí a la Federación Cubana de cara al Clásico Mundial.
¿Cómo se integrarían estos refuerzos?
Según fuentes oficiales cubanas, la plantilla de la isla con vistas al Clásico de seleccionaría atendiendo a los resultados del equipo ganador de la Liga Élite, torneo que se disputa actualmente y que acoge a los mejores jugadores se la Serie Nacional, en equipos regionales.
Está por verse cómo se podría fusionar la lista de peloteros cubanos jugando en el extranjero y los que lo hacen solamente en casa, toda vez que el béisbol en Cuba ha sufrido un deterioro en sus resultados en los últimos años, y un temor de los expertos es que las estrellas ligamayoristas opaquen a sus coterráneos.
