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Texto: Hugo León
Un tribunal federal estadounidense ordenó una condena de 15 años de prisión para Manuel Rocha, el ex diplomático que se declaró culpable de haber espiado para Cuba durante sus labores como embajador.
Los 15 años de condena otorgados por la jueza Beth Bloom están divididos en dos cargos: cinco por el cargo de conspiración, y 10 por actuar como agente ilegal de un gobierno extranjero, según medios de prensa estadounidenses.
La condena deberá cumplirse consecutivamente y el acusado deberá pagar también una multa de 250 mil dólares por cada cargo. Manuel Rocha también enfrenta tres años de libertad supervisada por cada cargo, pena máxima que permite la ley de los Estados Unidos.
Para más dramatismo, el juicio se celebró en Miami, territorio donde la tensión con el gobierno cubano ha persistido durante años, y el tema de los infiltrados en la diáspora saca chispas entre la emigración.
“Le diste la espalda a este país una y otra vez”, dijo duramente la jueza al exdiplomático por traicionar a su país.
No obstante, sus palabras no fueron las más fuertes que ha debido escuchar Manuel Rocha tras conocerse su traición y su labor de espionaje para La Habana: para el Fiscal General de Estados Unidos, Merrick Garland, los crímenes que cometió son “una de las filtraciones de mayor alcance y más duraderas en el gobierno de EEUU por parte de un agente extranjero”.
Exembajador estadounidense admite haber sido espía para el gobierno cubano
Manuel Rocha: 15 cargos penales diluidos
El ex embajador enfrentaba en total 15 cargos penales, entre ellos actuar como agente de un gobierno extranjero, conspiración para cometer ese mismo crimen, fraude electrónico, declaraciones falsas en una solicitud de pasaporte, uso de un pasaporte obtenido mediante una declaración falsa, entre otros.
Pero Rocha se declaró culpable de los dos cargos más significativos, los dos primeros mencionados, y con esto logró que la jueza retirara los otros 13 cargos de los que se le acusaba.
Pese a esto, no fue sino hasta ahora que se supo en cuántos años se había cifrado el acuerdo entre el demandado y los acusadores.
Según el resultado del juicio, Rocha habría espiado por varias décadas para el gobierno de La Habana, algo que inicialmente negó rotundamente y que dos semanas después aceptó. Entretanto, ante el tribunal, Rocha no pudo más que asumir “toda la responsabilidad”, tal cual se le pudo escuchar en la audiencia.
Cuba ha hecho oídos sordos de todo lo relacionado con el caso de Rocha. Pese a que se está juzgando a una persona infiltrada del Gobierno de La Habana en las altas esferas de la diplomacia estadounidense, el Minrex no ha emitido ninguna declaración al respecto.
El ex embajador estadounidense, quien se declaró culpable de varios cargos relacionados con espionaje tras una investigación del FBI, recibió una condena de 15 años de prisión
