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Texto: Héctor García
Las fuertes y prolongadas lluvias de estos días en el occidente del país, así como el descenso de las temperaturas propio del mes y la alerta emitida sobre el deterioro de las condiciones meteorológicas que tuvo a los habaneros esperando incluso tormentas severas con granizo, han dejado una pregunta entre no pocos lectores: ¿puede nevar en Cuba?
La interrogante ha sido recurrente en varias ocasiones en el país a lo largo de los años, y los cubanos, que con 23 grados de temperaturas sacan los abrigos, se toman el frío muy en serio. No obstante, un sueño de muchos de ellos es “ver la nieve”, algo que han logrado miles que han emigrado porque hasta ahora en la isla, de nieve… ni una pulgada.
¿Es posible o no que caiga nieve en Cuba?
Varios expertos que han abordado el tema con anterioridad no tienen una respuesta “definitiva”. Si bien coinciden en que es bastante difícil que ocurra, algunos dejan abierta la posibilidad, principalmente porque las variables meteorológicas son incontrolables y las predicciones no pasan de ser eso, estimaciones y vaticinios basados en datos y patrones que en algún momento pueden cambiar.
Hace algunos años el meteorólogo cubano Dr. José Rubiera dedicó un texto al tema en el cual aseguraba que las condiciones necesarias para la caída de nieve no pueden darse en Cuba o el Caribe. “Cuba es un archipiélago; lo bañan las aguas del golfo de México, del mar Caribe y del Atlántico, y todas esas aguas conservan las temperaturas muy altas, aun en invierno”, explicaba entonces.
Para él, es improbable que nieve en Cuba. “En el clima actual, eso es imposible; y en el clima futuro, según van las cosas con el calentamiento global, más que imposible”, subrayó.
Pero esa no es la única voz autorizada que ha emitido su opinión. Scott Doering, del Servicio Meteorológico Nacional de los Estados Unidos, cree que la caída de nieve en Cuba es posible en teoría, al menos en el punto más alto de Cuba, es decir, el Pico Turquino que está a más de mil 900 metros sobre el nivel del mar.
Una explicación con lujo de detalles
Cuba Noticias 360 entrevistó al meteorólogo cubano José Manuel Irañeta en busca de más detalles, y el especialista explicó que la nieve en sí misma es un tipo de precipitación que normalmente ocurre en latitudes medias y altas asociado a temperaturas bajas, normalmente en períodos invernales.
“Las condiciones termodinámicas de nuestra atmósfera no son de latitudes medias”, indicó Irañeta, y agregó que hay condiciones específicas que determinan los picos de temperatura mínima en el país. Estas son, según detalló, “la existencia una masa de origen continental muy al norte o polar que llegue al trópico; vientos muy débiles o prácticamente en calma; cielo despejado o con una capa muy fina de nubes altas, y que se trate de lugares alejados de las costas”.
“Las temperaturas más bajas en Cuba se han registrado en sitios como Bainoa, Tapaste, Indio Hatuey y Aguada de Pasajeros, en la región occidental pero más bien al interior, alejados de las costas”, recordó.
El récord absoluto de la temperatura más baja en Cuba es de 0,6 grados Celsius, registrado en Bainoa en 1996, pero no se habla de que haya nevado en ese momento.
La explicación radica en una situación lógica a la que apunta el entrevistado: para que haya nieve tienen que cumplirse varias situaciones, entre ellas una temperatura atmosférica a 0º o inferior y una humedad relativa concreta en la atmósfera, mientras que para ver un pico de temperatura mínima en Cuba una de las condiciones necesarias mencionadas anteriormente fue la de prácticamente cero nubosidad.
Entonces, siendo que la nieve es un tipo de precipitación, “si no hay nubes no puede haber precipitación de ningún tipo, ni lluvia ni nieve”, concluyó.
Vistas las opiniones de los expertos, cabe preguntarse entonces qué pasó realmente en La Habana el 28 de diciembre de 1932, cuando supuestamente “nevó”, según publicó la revista Carteles unos días después.
¿Nieve en La Habana? El misterio develado
En la edición del 1ro de enero de 1933 de la mencionada revista, una de las más famosas de la época en Cuba, fueron publicadas varias imágenes del Capitolio y zonas aledañas al Parque Central cubiertas con una fina capa blanca. La supuesta nevada habría ocurrido el 28 de diciembre anterior entre las 6:17 y las 7:11 am, pero estudios posteriores demostraron que esto era falso.
Las fotos “exclusivas” al parecer fueron editadas a mano dibujando sobre los negativos, pues en aquel momento la fotografía era analógica y no existían programas de edición. La publicación incluía partes meteorológicos que mencionaban temperaturas inferiores a los 15 grados Celsius.
Pero… ¿15 grados? Según lo explicado por los especialistas la temperatura tiene que descender mucho más para ver nieve.
En 2016 el Dr. Rubiera afirmó en una extensa publicación explicativa que en Cuba “nunca ha nevado”, aunque en más de una ocasión se haya llamado “nieve” de forma errónea a eventos meteorológicos singulares.
Entonces, ¿nevará en Cuba algún día realmente? La sabiduría popular recuerda que “contra la naturaleza, nada”, así que aunque por lo pronto no haya que preocuparse por temperaturas gélidas y copos de nieve cayendo sobre la isla, no se puede descartar que el fenómeno sorprenda algún día.
Al respecto, el meteorólogo José Manuel Irañeta respondió: “¿Podría nevar en Cuba algún día?, si cambian las reglas del juego con procesos de glaciación o de enfriamiento global cabe la posibilidad, pero con las condiciones actuales que hoy conocemos que existen, es improbable, prácticamente imposible”.
