Foto: Wikimedia Commons
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Con 85 años de edad y una incuestionable obra artística, la cantante cubana Regla Teresa García Rodríguez ‘Teté Caturla’ falleció en La Habana este lunes víctima de una penosa enfermedad.
Natural de Remedios, Villa Clara, Teté es la hija menor del destacado compositor cubano Alejandro García Caturla y desde muy pequeña siguió los pasos de su padre en su ciudad natal integrando la Banda Infantil y realizando estudios en la Academia Municipal de Música.
A pesar de ese gran amor por el arte, Teté decidió estudiar en la Escuela Normal, graduándose como maestra. Pero el destino para ella era indudablemente la música por lo que escogió dedicarse por entero a ella y trasladarse a la capital cubana en 1958.
Ya en La Habana actuó junto a la popular orquesta femenina Las Anacaonas, hasta que en 1963 ingresa como cantante del Cuarteto D’Aida, junto a Omara Portuondo, Xiomara Valdés y Lilita Peñalver.
Ese fue el gran inicio de una prometedora carrera a bordo de una formación musical que marcó un hito en la música y la cultura cubana. Con las D’Aida grabó varios discos y se presentó en centros nocturnos de moda como Tropicana, Parisién, Caribe, y los hoteles Riviera y Capri, entre otros.
Pero su alcance llegó más lejos, formando parte de la parrilla de muchos espacios radiales y televisivos, además de subir a los escenarios de diversos teatros, siempre sin dejar de lado su presencia internacional en varios países de América, Europa y Asia.
Con el fallecimiento en 1973 de Aida Diestro, fundadora y directora del Cuarteto, Teté asume la batuta del grupo junto a su hermano Ramón García Caturla, un período que igualmente le traería muchos éxitos nacionales e internacionales.
Ciudades de Panamá, México, España, Angola y Finlandia, entre otros, fueron testigos del terremoto musical que representó y representa las D’Aida. A la par, Teté formó durante la década de los 80’ del grupo Estrellas de Areito, donde compartió con artistas de la talla de Miguelito Cuní, Pío Leyva, Enrique Jorrín, Rafael Lay, Richard Egües, Félix Chapottin, Cachaito López, Amadito Valdés y Tata Güines, entre muchos otros.
Tras la desintegración en 1988 de las D’Aida, la artista decide emprender como solita en el proyecto Afro-Cuban All Stars, el cual la llevó a grandes eventos en Holanda, Suiza, Alemania, EE.UU., Reino Unidos y Canadá, entre otros países.
Un momento especial significó también su participación como solista invitada a la grabación de varios volúmenes vinculados al Buena Vista Social Club, donde unió voz con otras figuras como Ibrahim Ferrer y Omara Portuondo.
No fue hasta 2003, año en que celebró sus 40 años de vida profesional, que Teté lanzó su primer álbum personal titulado “Llegó Teté”, un álbum muy esperado y celebrado por la crítica que fue, además, merecedor de un Gran Premio Cubadisco.
Con una autenticidad inigualable, la cantante continuó hasta su muerte presentándose tanto en Cuba como en otros escenarios internacionales, ya fuera como parte del proyecto Estrellas del Buena Vista Social Club o con su grupo Rumba Tere.
Con casi 60 años de carrera musical, Cuba pierde a otra de las míticas cantantes de antaño, partícipe de una generación de memorables figuras femeninas. Su presencia, singularidad, cubanía y autenticidad quedarán para siempre en los sonidos de esa isla que hoy dice adiós a una artista como pocas.
