Foto tomada de Nola.com
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
El cantante cubano Cimafunk celebró la primera edición del CimaFest NOLA, un evento especial que tuvo lugar este fin de semana en el Teatro Cívico de Nueva Orleans, EE.UU., y que puso a toda la ciudad a bailar con los ritmos de Cuba.
Desde las 9:00 p.m. (hora de EE.UU.), el público disfrutó del artista junto a otros invitados como los percusionistas Pedrito Martínez y Brenda Navarrete. El “Afrocuban groove en New Orleans” como aseguró previamente Cimafunk se hizo sentir en la ciudad estadounidense.
Desde sus redes sociales Erik Iglesias Rodríguez compartió algunos momentos del evento, donde se le ve con su acostumbrado histrionismo sobre el escenario ante un público eufórico con sus auténticos sonidos.
“Acaba de terminar ahora el CimaFest la primera edición, muchas gracias a toda la gente que participaron, a todos los artistas que estuvieron ahí, gracias por ser parte de este evento tan partidor y muchas gracias a mi equipo. Gracias Nueva Orleans por recibirnos y echarla tan rico con nosotros”, dijo Cimafunk en el video publicado en sus perfiles.
Según agregó, después de esta primera experiencia el artista no se detendrá y realizará una segunda edición del evento el próximo año, por lo que invitó a todo su público a estar atentos para que no se pierdan esta fiesta musical.
“No se mareen mi gente porque la próxima edición viene el próximo año, así que pónganse en talla. Prepárense que el año que viene se calienta Nueva Orleans. Se les quiere mi gente”, concluyó Erik Iglesias.
El CimaFest anunciado desde semanas previas pretendía “sacar lo mejor de los ritmos y tradiciones cubanos e infundir sonidos y estilos de África y los EE.UU.”. Bajo esta premisa Cimafunk ha creado, según la web oficial del evento, “algo único y especial, no solo en términos de música sino también con los valores que representa”.
El artista “está redefiniendo la música cubana contemporánea, así como la identidad afrolatina y la fusión de culturas negras”, agregaron. Algo que sin dudas quedó demostrado este fin de semana en Nueva Orleans y que como advirtió Erik no se detendrá.
