Texto: Redacción Cuba Noticias 360
A un día después del estreno del animado musical Vivo, no han tardado las críticas al filme, que desde el tráiler ya levantaba muchas expectativas, sobre todo por la conexión con la música cubana y latina que hace el destacado compositor Lin-Manuel Miranda.
Este artista, crea la atmósfera ideal de La Habana en las canciones de Vivo, y le da voz y canto al personaje protagónico.
A ello sumemos la participación del músico y productor cubano Juan de Marcos- de agrupación Buena Vista Social Club- en la voz de Andrés, un hombre que le proporciona un hogar a un kinkajú víctima del comercio ilegal de animales y lo bautiza bajo el nombre “Vivo”.
Pero, ¿cómo De Marcos describe la representación de su país que vemos en la cinta? :“Es absolutamente la forma en que se comporta la gente. Es la arquitectura de La Habana. Es el Malecón…» dijo en una entrevista, recordando que creció a media milla del Malecón y asegura que tanto este como el Capitolio y la calle San Lázaro están bien diseñados conforme a la realidad.
“Creo que la película capta muy bien el espíritu del país, el espíritu de La Habana, la arquitectura, la forma en que se comporta la gente. Porque esto es algo importante”, refleja el cubano.
El también nominado al Grammy se arriesga a decir que “la gente de Cuba va a estar muy feliz cuando vean que su ciudad, La Habana, está tan bien representada”. Tampoco cabe duda que las canciones y experiencias sonoras de la película animada son todo un disfrute para la audiencia latina en todo el mundo.
Diez años le llevó a Lin-Manuel Miranda hacer realidad esta película musical animada. El famoso creador de la pieza ‘Hamilton’ llevaba desde el 2009 esbozando la historia de un pequeño oso de miel conocido como un kinkajú, que junto con su dueño, Andrés, se dedican a cantar en una Habana llena de color y de ritmos caribeños.
Vivo se ha convertido en un proyecto que ha generado mucha expectativa, no solo por ofrecer una mezcla de musical con película animada bajo una idílica mirada de Cuba, sino porque refleja otros aspectos relacionados con la conexión cultural y hasta las barreras que tiene el país.
