Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Cuba Noticias 360
Cinco meses después de la implementación del impopular proceso de bancarización en Cuba, el Banco Central “celebra” los discretos resultados.
Desde agosto de 2023 hasta la fecha “se aprecian avances en la cantidad de operaciones sin utilizar efectivo, con un ritmo mensual de crecimiento del 0.6%”, expuso por sus plataformas oficiales de redes sociales.
El proceso, que implica realizar todos los pagos de servicios, productos y demás operaciones comerciales y financieras mediante el uso de instrumentos de pago y canales electrónicos, en lugar de utilizar dinero en efectivo, no fue bien recibido por la población cubana.
Varios puntos de debate generaron esta nueva medida: escasez de efectivo en cajeros automáticos con consecuente largas colas, el negocio de la “venta de efectivo” por un cifra de transferencia superior y lo que es más llamativo, la negativa de muchos negocios a aceptar pagos por canales electrónicos, sobre todo, porque las condiciones para estos no estaban ni están creadas.
Usuarios han planteado algunas quejas basadas en que muchas personas solo van al banco para retirar dinero, otros se preguntan cuándo se honrarán los certificados de depósito que los clientes están esperando.
Alegan, por otra parte, que aunque el proceso puede ser beneficioso para los clientes, representa un costo adicional para las empresas, ya que deben pagar una comisión del 3% por el uso de estas plataformas.
La idea de Alejandro Gil Fernández, ministro cubano de Economía y Planificación, es que la bancarización está beneficiando la población. Por el contrario, los datos oficiales hablan de otra realidad: solo el 4.4% de los pagos del comercio interior se realizan por plataformas digitales y aún continúan las insatisfacciones.
Por su parte, el vicepresidente del Banco Central de Cuba ha dicho que esta es una norma emitida con toda la facultad del BCC, la cual regula “una serie de aspectos sobre la actividad financiera, el uso de las cuentas bancarias que deben tener las personas con su banco y el uso eficiente, seguro y legal de cada uno de los actores”.
