Foto: RL Hevia
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Aunque las opciones de salida y recreación para el cubano de hoy casi siempre están en constante pulseo con la economía y el bolsillo, aún quedan, propuestas de teatro a las que asistir en busca de “pasar un buen rato”. Especialmente durante estos días en el que se celebra la edición número 20 del Festival Internacional de este arte escénico.
El Teatro El Público es uno de los grupos más reconocidos en La Habana. Con una propuesta innovadora y arriesgada, este grupo ha ganado el reconocimiento internacional por sus producciones vanguardistas. Su sede ubicada en la calle Línea entre A y Paseo, siempre es una apuesta segura por su programación y por lo relativamente fácil que puede ser llegar hasta la “casa de Carlos Díaz”.
Para aquellas personas que viven más cercanas al cerro o Nuevo Vedado, o simplemente les interesa un teatro interesado en búsquedas escénicas más apegadas a la realidad cubana, está Argos Teatro, fundado por Carlos Celdrán. El grupo, que en estos momentos desde Cuba lo coordina la actriz Yailin Coppola, se destaca por su compromiso con la exploración de temas sociales y políticos a través del arte teatral.
En esa misma zona geográfica se encuentra Teatro Buendía, uno de los grupos decanos de este arte en Cuba, “el Buendía” por su parte, es conocido por su enfoque experimental y su capacidad para fusionar diferentes formas de expresión artística en sus producciones. Fundado por Flora Lauten, esta agrupación ha estado en contacto con el teatro clásico internacional, pero desde una perspectiva de diálogo con la Isla.
Otra apuesta sólida, ubicada en La Habana Vieja, es Nave Oficio de Isla, situado en los almacenes de San José, este grupo teatral liderado por el actor Osvaldo Doimeadiós, nuclea a un grupo de jóvenes actores y actrices que han asumido puestas en escenas de creadores cubanos como el cineasta Arturo Sotto, pero también se enfrentan a clásicos universales. La sede como tal también ha recibido grupos teatrales de otras provincias como el grupo matancero El Portazo.
Además de estos grupos teatrales con sedes fijas, en el circuito habanero algunas salas teatrales luchan contra viento y apagones por mantener abierta sus puertas a grupos o directores que, sin poseer sede fija, aun así, tienen propuestas variadas que ofrecer al público cubano. Este el caso del complejo teatro Bertolt Brecht, fundamentalmente su sala Tito Junco. Así mismo en el circuito de la calle Línea está la Sala Raquel Revuelta, que, con menos frecuencia, también abre sus puertas para algunas agrupaciones de otras provincias del país.
En cuanto a este arte escénico, pero enfocado en los más pequeños está Teatro La Proa, con su sede en los bajos de la Tienda Carlos III, esta agrupación busca en los títeres fundamentalmente, una vía de entretener a los pequeños de la casa junto a sus padres.
Luego de la pandemia y la agudización de la crisis económica cubana, pudiera parecer que el teatro cubano sufre de algún tipo de receso, pero lo cierto es que agrupaciones, actores y actrices, se esfuerzan porque este arte siga entreteniendo y motivando a pensar a los residentes de la capital cubana.
