Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
La migración interna es otro de los tantos problemas que enfrenta actualmente Cuba. Aunque el asunto no es comparable con el éxodo masivo hacia el exterior, sí es un tema que preocupa a las autoridades estatales, principalmente por el abandono de las zonas rurales.
El aumento de las migraciones internas estuvo entre los tópicos abordados durante una reciente reunión de la Comisión Gubernamental para la atención a la dinámica demográfica, según informó el medio Cubasí.
A este asunto se sumaron otros como la contracción del número de nacimientos, la baja tasa global de fecundidad, el aumento del envejecimiento y el decrecimiento natural de la población, entre otros.
Durante el encuentro, el vicejefe de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI), Juan Carlos Alfonso Fraga, comentó que estos movimientos demográficos deben ser tomados muy en cuenta “por las implicaciones y efectos en una serie de tendencias de menores capacidades”.
Además, señaló que Cuba es el único país de América Latina que cuenta con un sistema estadístico para medir las migraciones internas, lo cual expresa, “la importancia que aquí le es conferida al tema estadístico”.
Entre los datos ofrecidos en el reporte, destacan los del Anuario Estadístico de Cuba 2022, publicado en 2023 y que indica que un total de 65 978 cubanos se había desplazado dentro del país en esa fecha.
Respecto a las provincias que más migrantes internos recibieron en ese año destacan La Habana, Artemisa y Matanzas. Estos territorios, según especialistas, son los más llamativos debido a las condiciones de vida y de trabajo.
Otras razones mencionadas que dan motivo a la migración interna están relacionadas con el tema de la comercialización de productos, los problemas con la transportación, con el combustible para la cocción de los alimentos, entre otros.
Asimismo, destaca el hecho de que las relaciones de género se muestran más asimétricas en las áreas rurales, lo que condiciona que la migración hacia las zonas urbanas sea mayoritariamente femenina.
El acceso a los servicios de salud y educación son dos de los factores que condicionan que las mujeres emigren para intentar acercar a sus hijos a las escuelas y hospitales, instituciones que generalmente están alejadas de las zonas rurales.
Según las autoridades cubanas, uno de los objetivos a alcanzar es reducir los flujos migratorios internos y atenuar el despoblamiento de los entornos rurales, para lo cual se desarrollan diversas iniciativas estatales y programas educativos en las zonas más alejadas de las grandes ciudades.
Este asunto viene tratándose desde hace varios años por parte del gobierno de la isla. Ahora, en tiempos en los que se experimenta una intensa crisis económica y social, el flujo migratorio hacia el exterior no parece ser el único tema que preocupa a los dirigentes.
Miles de cubanos continúan moviéndose hacia las provincias occidental en busca de una mejor calidad de vida, aunque la situación en el país no parece mejorar, incluso en algunas zonas consideradas por muchos como “privilegiadas”.
