Foto: Máxim Rock Cuba | Facebook
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Una nueva polémica ha surgido este año tras la celebración de Halloween en Cuba, esta vez ligada a una fiesta celebrada en una institución estatal, el Maxim Rock.
El centro cultural, perteneciente al Instituto Cubano de la Música (ICM), realizó este sábado una competencia de disfraces por Halloween, en la que compitió y ganó el primer premio un cubano vestido con un uniforme de una militar fascista.
Tras el suceso, y según las autoridades culturales del país, surgieron varias quejas tanto en redes sociales como planteamientos a los directivos, donde se repudiaba “tan deleznable suceso”, según una nota del ICM.
Por esta razón, “dada la gravedad del hecho y la evidencia de la incapacidad de la institución cultural para preverlo, se tomó la decisión de cerrar, de manera inmediata, el Centro Cultural Maxim Rock”, agrega el texto publicado en medios de prensa estatales.
La decisión se mantendrá “hasta tanto se esclarezcan los hechos, se hagan los análisis correspondientes y se tomen las medidas disciplinarias con cada uno de los responsables del suceso, que, además de constituir una violación de las directivas para la programación cultural, vuelve a poner sobre la mesa el tema de los peligros de la colonización cultural”.
Asimismo la información afirma que “incidentes lamentables como este, que violan flagrantemente la política cultural de la Revolución Cubana, vulneran la moral y los principios sobre los que se funda el proyecto social cubano y hieren la sensibilidad ciudadana antifascista, antirracista y antisionista, merecen todo nuestro repudio y recibirán la más enérgica respuesta del sistema institucional de la Cultura”.
Ayer domingo, Cubadebate publicó un artículo firmado por el periodista Pedro Jorge Velázquez, donde se amplían detalles del suceso. En un primer momento, se recuerdan las críticas suscitadas años atrás en esta misa celebración por el uso de un grupo de jóvenes de disfraces del Ku Klux KIan y afirma que “esta vez se llegó a lo peor”.
Según el texto, las medidas tomadas no son “un ataque a la celebración del Halloween en Cuba. Creemos que no hay forma de prohibir ni detener esta práctica. Pero sí es un llamado a la corrección, atención y el trabajo político para que esta celebración no incluya disfraces como este. Ni en instituciones estatales ni en privadas”.
El periodista advierte que en Alemania y otros países del mundo, estas formas de representación tienen consecuencias legales. “En Cuba habría que tomar medidas de este tipo, porque cada año se exacerba esta penosa situación”, agregó.
Algunos usuarios han compartido igualmente su parecer respecto a la utilización del disfraz, la mayoría en contra de la actitud del sujeto. No obstante, hay quienes temen que esto sea solo un pretexto para cerrar la única institución que “oficialmente” daba cabida a los amantes del Rock en Cuba.
“Un desliz era todo lo que se necesitaba para cerrarnos el Maxim Rock, y ahí está. Solo nos queda esperar que ahora el cierre no sea eterno”, advirtió un internauta.
Creo que celebrar es bueno, lo que también creo es que hay que respetar, el año pasado KKK, ahora un soldado nazi, cuantas heridas abiertas hay por esto en el mundo cuantas familias desaparecidas, acaso no creen que lo que hoy ocurre entre Israel y Palestina y que tantas familias lloran de ambos lados tenga algo que ver con los nazi, cuantas personas negras se asesinan en Estados Unidos, olvidamos acaso nuestra raíces africanas, creo que disfrutar es maravilloso, pero también respetar lo es.
Heil Hitler 🤣🤣