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Texto: Redacción Cuba Noticias 360
En la memoria de los cubanos aún está el inigualable sabor del jugo Taoro, uno de los tantos productos que desaparecieron como por arte de magia de los mostradores de los comercios y del paladar de los de la isla hace ya unos cuantos años.
Más allá de la añoranza, el popular néctar de mango hizo su aparición una que otra vez durante estos últimos años. Era raro, pero algunos lo conseguían. Ahora, tras cuatro años de paralizada su producción en el oriente de Cuba, las autoridades estatales han informado de la puesta en marcha de la línea productiva del Taoro.
Según una nota del diario estatal Granma, en el municipio Yara, provincia de Granma, se realizó recientemente una prueba tecnológica que contempló la obtención inicial de unas 7 800 latas del gustado jugo.
El director de esta industria, perteneciente a la Fábrica de Conservas y Vegetales, Juan Franklin Almiral Rodríguez, explicó que la prueba sirvió para “corregir desajustes técnicos, realizar mantenimientos y evaluar la calidad del proceso, antes de retomar la producción a escala industrial”.
Antes de dicha prueba, los técnicos de la empresa recuperaron “la máquina tapadora y cambiaron la velocidad al motor de la llenadora de la línea”, con el objetivo de “elevar la eficiencia productiva y reducir el porcentaje de las pérdidas de las latas que se desechan, al cierre del proceso”.
La información amplió que se realizó, además, una contratación para importar 10 millones de latas de aluminio de 330 mililitros, que se utilizarán para producir néctares de cuatro sabores: guayaba, tamarindo, piña y mango.
Sobre este último, refieren que está considerado “el producto insignia de la entidad, única de su tipo en Cuba con patente internacional para la producción del jugo Taoro”.
Para iniciar el proceso de producción, el directivo añadió que ya se cuenta con parte de la pulpa de mango y tamarindo que será procesada y próximamente se efectuarán los contratos para adquirir las de guayaba y piña.
Una vez que arranque la producción de los néctares a escala industrial, se podrán alcanzar volúmenes de entre 15 y 19 toneladas diarias, afirmó Almiral Rodríguez.
No obstante, el dirigente cubano especificó que la comercialización de estos productos se realizará “con el propósito de recuperar divisas, oxigenar la salud financiera de la industria y adquirir máquinas como la retractiladora y la fechadora (para elevar la eficiencia de la vieja línea)”.
Es por ello que una parte de la producción se destinará a la exportación, mientras “otro volumen se destinará a la venta en el mercado nacional, así como al sector turístico y a otros organismos”.
Aunque no se detalló el volumen específico del producto que llegará a las tiendas, ni el precio en que se comercializará el gustado jugo, aún queda la esperanza de que los cubanos, en algún momento no tan lejano, puedan disfrutar nuevamente de su inolvidable sabor.
