Foto: Rosalía Suárez Said | Facebook
Texto: Fede Gayardo
El Cuerpo de Guardabosques de Cuba mantiene controlado uno de los incendios forestales de grandes proporciones que se desataron esta semana en el municipio de San Juan y Martínez, de Pinar del Río.
Según la información publicada por los medios estatales de prensa, trabajadores agrícolas y campesinos del lugar conocido como Agua dulce, se sumaron a las acciones de los guardabosques cubanos.
El teniente coronel Alexander Pereda, jefe del Cuerpo de Guardabosques en el territorio occidental, dio a conocer que las llamas fueron aplacadas también por las ligeras lluvias de las últimas horas.
El incendio abarcó entre 150 y 156 hectáreas de pino Caribaea joven y en estos momentos se mantiene la guardia de ceniza para contribuir a la extinción del fuego, amplió el directivo.
“Más de 60 hombres trabajan para evitar que el incendio supere las 150 hectáreas de plantaciones de Pinus Caribaea que han sido afectadas, preliminarmente, según informó Brandy Fajardo Rivero jefe de circuito de protección Cerro de Cabra”, publicó por su parte en Facebook la periodista Rosalía Suárez Said.
Además, agregó que “el otro incendio ha dejado en cenizas un área boscosa mucho mayor (aún sin definir con exactitud) y hasta allí esperamos llegar”.
Luego, Suárez informó que había llegado hasta la zona del segundo incendio, “el mayor y donde están reunidas ahora todas las fuerzas para controlarlo y extinguirlo”.
En este caso, el fuego se inició en Máquina Vieja, un área próxima al poblado de Nuevo Galafre, en el propio municipio de San Juan y Martínez, donde se han visto afectadas alrededor de 530 hectáreas de bosque.
Las autoridades pinareñas afirman que no hay peligro para la población del lugar, aunque la extinción del fuego “se hace difícil dado el estado de los caminos, las tórridas temperaturas y el propio calor que emana el fuego”.
Por ahora se desconocen las causas de ambos siniestros, por lo que se ha alertado a la población del peligro que representa la quema descontrolada de residuos de cosecha, castración de panales de abejas y otras indisciplinas que provocan estas situaciones.
Hasta este momento, en la provincia de Pinar del Río se han perdido 800 hectáreas de bosques como consecuencia de 75 incendios forestales. El jefe de guardabosques concluyó que la situación no mejorará hasta finales de este mes cuando concluye el período de mayor peligrosidad debido a la intensa sequía.
