Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Que no pocos extranjeros se traguen el anzuelo lanzado por la industria turística de Cuba y lleguen a creer que la isla es solo ron, tabaco, mulata y guaguancó; que miles de visitantes foráneos se vayan de regreso a sus países con una apreciación tan básica y epidérmica de las esencias de esta nación, no quiere decir en modo alguno que solo los cubanos pueden comprender a los cubanos.
La Cuba que se vive desde la habitación de un hotel cinco estrellas no es la de los apagones, de las colas de días para comprar aceite y pollo, de los precios que aumentan de 100 en 100 de semana en semana, de las casas vendiéndose a precio de ganga para comprar un boleto en avión hacia Nicaragua o hacia cualquier parte.
Esa Cuba, la raigal, que a pesar de los pesares también sonríe y baila una rumba en el más destruido de los solares; esa Cuba, por suerte, también tiene extranjeros que la auscultan: los turistas que vienen, mochila al hombro, con intenciones más antropológicas que recreativas, y algunos artistas que, cámara en mano, han intentado desentrañarla.
Uno de ellos es Christopher P. Baker, nacido en Inglaterra en 1955 y radicado en Estados Unidos, pero que ha recorrido mundo suficiente como para saber que el misterio cubano va más allá de la algarabía y el desenfado de los anuncios comerciales.
Escritor y fotógrafo profesional, colaborador de prestigiosas revistas y autor de encumbradas guías de viaje, Baker se ha ganado por su trabajo durante décadas —no se lo ha regalado nadie— la categoría de experto en Cuba, que ha sabido mantener con sistemáticos recorridos por la isla, no solo hospedado en los hoteles de La Habana, sino habitando en los mismísimos hogares de no pocos cubanos, con especial énfasis en las llamadas provincias del interior.
Su más reciente proyecto fotográfico es un itinerario que documenta la vida cotidiana de destinos turísticos tan bien posicionados como La Habana, Viñales y Trinidad más allá de la escenografía dispuesta para el visitante; Baker retrata al cubano de a pie.
La peculiar arquitectura, el auto clásico devenido taxi de alquiler, el baile folclórico, la escena familiar, la omnipresencia de los héroes y mártires en los muros semidestruidos, estampas de manicuris y de quinceañeras figuran en la amplia muestra que Baker tejió con su proverbial conocimiento de la idiosincrasia criolla, esta vez por encargo de la agencia de turismo Jim Cline Photo Tours.
Y para que no faltara nada en esa radiografía de la isla, en sus redes sociales el propio artista lamentó que una adolescente que le había servido de modelo en anteriores sesiones de quinceañeras no había podido contratarla en esta oportunidad porque se había mudado a Miami. Bien lo sabe este hombre de mundo: la emigración provoca traumas internacionales.
El caso de Christopher P. Baker viene a probar que se puede ser extranjero y descubrir las esencias del cubano, revelar desde una óptica externa los conflictos de nuestra identidad nacional. Ahora, eso sí, la empatía con el pueblo —con la gente más humilde— solo se consigue zapateando las calles, no vacacionando en yates, ni asistiendo a recepciones oficiales.
Los que tanto escriben para denigrar a este país no mencionan una sola palabra de las causas de la mayoría de nuestras desgracias,claro si las mencionan no cobran,lo entiendo,entonces,por favor,déjense de hablar solo de lo malo que nosotros lo sabemos mejor que Uds que están fuera vacilando la croqueta,pero Uds saben que los HP de los s yanquis nos lo prohíben todo,hasta comprar con dólares,claro con los de ellos,pero bueno no voy a seguir escribiendo,no vale la pena.
solo quiero preguntarle al mister periodista si el se atreve a publicar esas mismas imágenes q el hiso de Cuba, pero de Inglaterra o EEUU, si lohace entonces si creo en el,y los bocetos q lo están anunciando,solo eso espero respuesta si lo desean,no pertenezco a nada en el país, ni estoy comprometido con nadie en esferas políticas y vivo el diario de todos los nativos
y entonces, Nelson Toledo, los dólares que ustedes tanto utilizan en Cuba son falsos???
porque has escrito que «hasta nos prohiben comprar con dólares»
aclarate hombre, que si decimos las verdades no significa denigrar a Cuba sino criticar a un régimen que se adueñó hasta de las neuronas de los cubanos. mírate a ti!!! das pena
Todo esto está muy bien expuesto. Pienso que además sería bueno darlo a conocer a los extranjeros, ellos necesitan estar claros de que hay una Cuba para sus disfrutes y otra Cuba para el cubano de a pie.