Foto: Archivo | CN360
Texto: Hugo León
Junio ha sido históricamente el mes con más lluvias en Cuba, y en este año, menos de dos semanas bastaron para romper registros a lo largo de la isla y superar la sequía que sufre el país caribeño.
Las intensas lluvias de las últimas jornadas llenaron los embalses de la nación antillana por encima del 60 por ciento de su capacidad, y en casos puntuales el índice de ocupación se acerca o supera el 90 por ciento, según fuentes oficiales.
De acuerdo con Argelio Fernández Richelme, director de Hidrología del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), a nivel nacional se han acumulado ya 146,2 milímetros de precipitaciones, el 75 por ciento de la media histórica para junio.
En la región oriental el promedio fue de 211,3 milímetros, lo cual representa el 141 por ciento de la media histórica para el mes.
Precisamente esta parte del país adolece hace años de una compleja situación hídrica, debido, entre otras causas, a la escasez de precipitaciones.
Agua para el oriente cubano
De acuerdo con Fernández, desde el punto de vista de la gestión de los recursos hídricos, este evento meteorológico ha resultado bastante beneficioso. Las lluvias han permitido el incremento del agua acumulada en los embalses, lo cual es vital para el abasto a la población y las actividades económicas, explicó.
Entre los acumulados más significativos en los últimos días de precipitaciones, están los registros de Camagüey con 289,7 milímetros, Granma con 281,2, Santiago de Cuba con 226,1 y Las Tunas con 214,9 milímetros.
Al cierre del 10 de junio, afirmó, el volumen del líquido retenido en los embalses del país era de algo más de cinco mil 829 millones de metros cúbicos, el 63,6 por ciento de la capacidad nacional.
Por provincias, los territorios con mayor llenado respecto a su capacidad total son los de Granma, al 94,2 por ciento; Santiago de Cuba al 86,6 por ciento y Holguín con el 84,8 por ciento de su capacidad ocupada.
Entretanto, Guantánamo, una de las provincias más afectadas por la sequía, no recibió iguales beneficios de las copiosas lluvias de las últimas jornadas, aunque en algo se alivió la situación hidrológica.
Cabe mencionar que pese a los beneficios para las presas y las reservas acuíferas cubanas en general, las lluvias de junio han dejado un impacto catastrófico en diversos sectores. Solamente en Granma se contabilizan más de 10 mil viviendas afectadas de alguna forma, entre ellos al menos 65 derrumbes totales y 214 parciales, mientras que en Camagüey se reportan cerca de 500 edificaciones dañadas
Además, las lluvias han dejado seis fallecidos y cuantiosos daños materiales, según informó el gobierno de la isla.
