Foto: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
Ir a la playa nunca había sido un lujo en La Habana. O al menos no hasta que llegó la pandemia y se demostró la importancia de tener un amigo coronel. Pasado un tiempo, con el aumento de los precios, la desaparición de las guaguas y la escasez de combustible, ir a Bacuranao, Guanabo o en general a las playas del Este es una salida que implica gastar miles de pesos.
¿Cuánto cuesta llegar a darse un chapuzón en las playas del Este? Para responder la pregunta hay que ver cuáles opciones hay disponibles para llegar.
Ir en guagua, dos pesos y dos días de viaje
En primer lugar están las guaguas, el método de transporte más barato pero a la vez el más lento de todos. Las colas de la llamada “400” ya eran famosas hace cinco o seis años por tardar largas horas y ahora, si ha cambiado, es para peor.
El precio de un pasaje en guagua es de dos pesos por persona, cinco o hasta 20 en dependencia del tipo de ómnibus, puesto que, por ejemplo, las Transmetro y las de refuerzo enviadas por las empresas no cobran lo mismo que las que cubren las rutas de los P.
Taxis y agencias de taxis en La Habana
Están también los taxis colectivos -los almendrones o geepy de toda la vida- que la generación que ahora cumple 30 años pagó con 25 pesos y luego 50 o 100 hasta antes del reordenamiento monetario iniciado por el gobierno.
Ahora… Por menos de 300 pesos ninguno de los choferes da el viaje y dependiendo del momento del día se llega a cobrar hasta 500. Pero claro, así ha sucedido con todo, multiplicándose los precios por 10, y los choferes que viajan hasta Guanabo o Mar Azul no son tontos ni van a trabajar “para el inglés”.
Esta opción es moderadamente rápida. Dependiendo de la cantidad de personas esperando para viajar a esos destinos, la cola suele avanzar con cierta celeridad. Sin embargo, en los últimos días hay menos carros dando los viajes, luego de que el gobierno impusiera nuevos precios que debían cobrar obligatoriamente los transportistas privados.
La más cara de las opciones, y a la vez la más segura y rápida de llegar, es viajar llamando a agencias de taxi o a choferes que trabajan por su cuenta. En estos casos la tarifa va desde tres mil pesos la ida, o el regreso, y si es ida y vuelta seis mil o cinco mil 500 como oferta especial.
!Tres mil pesos! Eso es el doble del retiro mensual de cientos de miles de pensionados cubanos y más que el salario mínimo del país, y esas no son las ofertas más caras.
En La Habana existen actualmente más de una decena de agencias de taxis, de las cuales Cuba Noticias 360 contactó con seis para comparar los precios de ir a Guanabo, partiendo desde la heladería Coppelia, en el Vedado. La más barata cobra tres mil, y la más cara cuatro mil por el viaje, en la modalidad “básico”.
En la modalidad “confort”, o sea, un carrito más moderno, con aire acondicionado y olorcito a tienda, la oferta más barata fue de cuatro mil pesos, suficiente para comprar viandas y vegetales para un par de semanas -ya la carne es otra cosa-.
¿Cuánto deben cobrar los taxistas según la ley?
Desde el 9 de junio último los taxistas no estatales deben hacer caso de una nueva resolución que deja el costo del pasaje hasta Guanabo en 170 pesos por persona, comenzando desde La Habana Vieja, Centro Habana o la Virgen del Camino.
Estas tarifas han causado algo mayor que molestia. Han logrado que haya menos carros cubriendo las rutas más largas en la ciudad y, en consecuencia, su impacto en el transporte ha sido negativo.
A quien más han beneficiado los precios estipulados es a quienes siguen decididos a cobrar lo que desean, pues con menos carros en la calle para hacerles competencia, nadie realmente necesitado de trasladarse les dirá que no.
Cuando lleguen las vacaciones, habrá que ver si el gobierno capitalino podrá destinar guaguas de refuerzo hacia las playas del Este, como en años anteriores, o si, como durante la pandemia, mojarse con agua salada que no sea la del Malecón va a ser un privilegio.
