Fotos: Roy Leyra | CN360
Texto: Hugo León
El hotel Habana Libre, uno de los sitios emblemáticos de la capital cubana, vuelve a tener un cartel que lo identifica con su nombre luego de varios años sin las famosas letras en la cima de la edificación.
Las letras instaladas en estos días respetan la tipografía, el diseño y el color característico del cartel histórico de la instalación, que durante años resistió el clima y el desgaste del tiempo hasta que finalmente comenzó a sucumbir y tuvo que ser retirado por completo para 2019.
En sus últimos años, el huracán Irma fue uno de los eventos climatológicos que más dañó el cartel y debido al abandono que sufrió y la pérdida gradual de las letras, durante un tiempo lo que se podía leer era “na libre”. Esto llamó la atención de miles de internautas cubanos que lo comentaron en las redes sociales.
Nuevas letras para el Habana Libre
Ahora, se instalaron nuevas letras de color azul que iluminan de noche gracias a luces led y en redes sociales muchos habaneros aprovechan la oportunidad para fotografiarse con el hotel al fondo de la imagen. Otros internautas han compartido fotos hechas en la noche, que muestran el cartel encendido.
El Habana Libre tiene una historia de más de 60 años. A esa edad llego en 2018 y durante décadas ha sido uno de los hoteles insignias de la capital.
Primero perteneció a la cadena hotelera Hilton y luego el gobierno revolucionario encabezado por Fidel Castro lo expropió. El exmandatario incluso situó su oficina personal en el Habana Libre durante los primeros años que estuvo en el poder.
Con el paso del tiempo, el Habana Libre ha perdido su protagonismo en el ámbito hotelero de la capital. El gobierno ha seguido invirtiendo cientos de millones de dólares en habitaciones de hotel, pero su estrategia ha sido fundamentalmente la construcción de nuevas obras.
Es así que se han levantado el Hotel Grand Packard, el Paseo del Prado, el Gran Muthu Habana y el Grand Aston La Habana, entre otros, pero otras instalaciones turísticas que fueron famosas antaño, no lucen ya su antiguo esplendor.
