Foto: Conor P. Fitzgerald | Shutterstock
Texto: Raúl del Pino
Si la vida te da limones… haz limonada. Y así decidió hacer el pelotero cubano José Iglesias, llevando a otro nivel el significado de este axioma popular. El talentoso paracortos que por 11 temporadas transitó por varias organizaciones de Grandes Ligas, tomó un nuevo e inesperado rumbo en su vida, toda vez que seguir en el más alto nivel del béisbol se le convirtió en una cuesta arriba imposible de subir.
“Candelita”, como es conocido el pimentoso jugador desde que era un adolescente, sorprendió a propios y ajenos con su primer sencillo musical. Sí, efectivamente, de llevar toda una vida sosteniendo un guante, un bate y una pelota con sus manos, ahora los cambió por un micrófono.
En sus propias redes sociales, Iglesias anunció el lanzamiento de Tambor, “la canción que los hará bailar hasta el amanecer”. El tema combina tonos caribeños y urbanos en una mezcla pegajosa que no debe dejar indiferente a nadie, sobre todo atendiendo al artista que la interpreta.
Hasta la misma cuenta en Instagram de MLB, con más de 10 millones de seguidores, reaccionó a la publicación con un emoji de fuego, dando a entender lo impactante de este “descubrimiento” musical.
Otro que tampoco demoró en comentar fue su connacional Yoan Moncada, de los Chicago White Sox, quien en su momento incursionó también en el mundo de la música con el sencillo Desastre Personal, en colaboración con el Chacal y Lenier.
De igual forma, otros reconocidos jugadores de la Gran Carpa, tanto en activo como retirados, también le dieron el enhorabuena. El extorpedero venezolano Omar Vizquel apuntó que “como buen SS de todo un poco hermano, camino al estrellato” y le deseó suerte. Lo propio hizo el lanzador dominicano Johnny Cueto.
Aunque la nueva faceta profesional de Iglesias no significa su retiro oficial del béisbol, sí representa una apertura hacia nuevos horizontes cuando parece que su carrera en Grandes Ligas llega al final. El infielder nacido en San José de las Lajas no ha logrado pisar este año un terreno de MLB ni con Miami ni con San Diego, los dos equipos con los que firmó un acuerdo de Ligas Menores.
Ya desde el mes de julio, en su propia cuenta de Instagram había dado pistas de lo que venía, pero nadie se imaginaba que fuera en serio, al menos cuando evidentemente a sus 33 años todavía tiene mucho béisbol para aportar.
