Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Alessia Pierdomenico | Shutterstock
Con un documento que representa un cambio radical en la política del Vaticano, el cual proclama a las personas que buscan el amor y la misericordia de Dios no deberían estar sujetas a “un análisis moral exhaustivo” para recibirlo, el papa Francisco autorizó a que los sacerdotes bendigan a parejas del mismo sexo.
Recordemos que, en octubre, Francisco envió una carta a dos cardenales conservadores y sugirió que tales bendiciones podrían ofrecerse en algunas circunstancias si no se confunden con el ritual del sacramento del matrimonio.
El nuevo documento repite ese razonamiento, reafirmando que el matrimonio es un sacramento de por vida entre un hombre y una mujer. Las bendiciones, de hecho, no deben conferirse al mismo tiempo que una unión civil o incluso con la vestimenta y los gestos propios de una boda.
Aun así, tales bendiciones no deben negarse por completo, por lo cual se detiene exhaustivamente a definir el término “bendición” en las Escrituras.
Aunque el comunicado de este 18 de diciembre deja claro la bendición de parejas del mismo sexo «en situaciones irregulares» para la Iglesia católica, mantiene su firme oposición al matrimonio homosexual.
En este sentido, expone: «Esta bendición nunca se realizará al mismo tiempo que los ritos civiles de unión, ni tampoco en conexión con ellos. Ni siquiera con las vestimentas, gestos o palabras propias de un matrimonio».
Agrega, entonces: «La posibilidad de bendiciones de parejas en situaciones irregulares y de parejas del mismo sexo, cuya forma no debe encontrar ninguna fijación ritual por parte de las autoridades eclesiásticas, para no producir confusión con la bendición propia del sacramento del matrimonio”.
Asimismo, declara: “La petición de una bendición expresa y alimenta, así, la apertura a la trascendencia, a la misericordia y a la cercanía a Dios en mil circunstancias concretas de la vida, lo cual no es poca cosa en el mundo en que vivimos”.
A pesar de no estar reconocido por la Santa Sede, ya algunos sacerdotes bendecían antes a parejas del mismo sexo, sobre todo países como Bélgica y Alemania.
Seis semanas después de la conclusión del Sínodo para el futuro de la Iglesia católica, reunión mundial consultiva entre obispos, mujeres y laicos donde se debatió, entre otros temas, cuestiones sociales como la aceptación de las personas LGTB y los divorciados vueltos a casar, se publica este documento.
