Foto: Jorge Luis Borges
Texto: Darcy Borrero
El cilindro de gas licuado del petróleo (GLP) de 10 kg —con el cual se cocina en cientos de hogares cubanos incluidos en un pacto social de la llamada Revolución Energética— se venderá casi al doble de su actual precio, a 213 pesos, desde el próximo 2 de enero como parte del ordenamiento monetario en Cuba.
Así lo informó la Unión Cuba-Petróleo, que además precisó que para los municipios sin venta liberada se mantiene la entrega de la reserva dos veces al año, al igual que sigue vigente la no contratación de nuevos clientes de venta liberada.
Según el comunicado referido por la prensa estatal, para establecer este nuevo precio del GLP se tuvo en cuenta el precio de la tonelada de GLP comprada en el mercado internacional, dado que Cuba no compra este producto al precio mundial. A lo que la prensa estatal llama “razones del bloqueo y el riesgo de sanciones ya conocidas por los proveedores” achaca el alto precio de 213 pesos que desde enero los cubanos tendrán que pagar por la conocida “balita” de gas.
Por si fuera poco, en la determinación del precio incluyen “los costos de transportación marítima, almacenamiento, llenado y comercialización, la reparación de los cilindros”… “Todos estos componentes están incluidos en esta tarifa”, por lo que reconoce que este precio no prevé subsidio.
Asimismo, sobre la venta en los últimos días de 2020, la Empresa de Gas Licuado informó que la adelantará para garantizar un servicio óptimo a la población y disminuir la concentración de las altas demandas de consumo.
*Los clientes normados con ciclo de compra entre el lunes 21 y domingo 27 de diciembre, podrán adquirir su cilindro cualquier día de la semana a partir del lunes 21 (excepto el 25, dado que no laboran los puntos de venta y grupos comerciales).
*A los que les corresponde entre el lunes 28 y el jueves 31 de diciembre, podrán adquirir su cilindro cualquier día dentro de este período.
*Los clientes de venta liberada podrán recibir el servicio cualquier día hasta el 31 de diciembre.
En abril del presente año, la misma Unión Cuba-Petróleo (Cupet) implementó medidas para mejorar las entregas a la población de gas licuado de petróleo (GLP), entre ellas la reducción a 30 días del ciclo de venta liberada exceptuando a los clientes “normados”. Se refirieron en aquel momento a la disponibilidad de ese combustible doméstico que existía en el país, por lo que disminuyeron los ciclos de reaprovisionamiento de los clientes normados.
Desde ese momento se decidió mantener la entrega de la reserva a los núcleos familiares que cocinan con electricidad y reciben este producto “adicionalmente”, si bien en muchos de esos hogares la forma de cocción más empleada es la de gas debido a roturas de equipos electrodomésticos y altos costos de la electricidad. De ahí que estos usuarios tengan derecho a la compra de un cilindro mensual liberado, en los meses en que no coincida con la compra de la reserva.
