Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Foto: Kamira | Shutterstock
México ha superado a Rusia como proveedor de petróleo a Cuba. En los últimos 4 meses, de hecho, han llegado casi dos millones de barriles de Pemex y en barcos administrados por la isla.
Según datos de monitoreo de buques, y de la agencia Reuters, Cuba ya ha comenzado a utilizar sus propios tanqueros para aumentar las importaciones de crudo desde México, en medio de una evidente crisis de combustible.
Los apagones y las largas colas de días para llenar los tanques de los autos, más el castigo de sanciones económicas de Estados Unidos, han provocado un caos en Cuba y por ello ha recurrido a México en su intento de aliviar la crisis tanto como para reducir la dependencia de su mayor proveedor, Venezuela.
Recordemos que desde el mes pasado, el buque Vilma, con bandera cubana, ha realizado dos viajes desde la terminal mexicana Pajaritos a las refinerías cubanas de Cienfuegos y La Habana.
Ello se sumó al que cargó el petrolero Delsa, que también entregó crudo mexicano en junio desde Pajaritos a Cienfuegos, para luego zarpar hacia Venezuela, donde cargó petróleo.
Ambos buques son de los pocos petroleros cubanos que no han sido sancionados por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
En este sentido, otros barcos cubanos han sido reparados o inspeccionados en un astillero en Veracruz, México, como es el caso de Esperanza, que sí está incluido en la lista negra de Estados Unidos, el cual se encuentra actualmente en el puerto mexicano.
El Departamento de Estado estadounidense tiene claro que Cuba compra petróleo a diversos países tanto sancionados como no sancionados, pero la Isla sigue estableciendo convenios para intentar sostenerse.
Asimismo, el buque Bicentenario de Pemex ha realizado por separado al menos cuatro viajes de México a Cuba este año.
Cifras oficiales confirman que desde abril México ha suministrado a Cuba unos 13,000 barriles diarios (bpd) de crudo ligero Olmeca. Dicha variedad es mucho más adaptable a las viejas refinerías cubanas que el petróleo pesado venezolano.
Como hemos informado en los últimos años, Venezuela ha tenido recurrentes problemas para producir suficiente combustible para cubrir sus necesidades internas y ello, por supuesto, reduce lo que puede exportar.
En este sentido, sus envíos a Cuba este año hasta el mes de julio, cayeron a 55,000 bpd desde casi 80,000 bpd en 2020.
