Fotos: Roy Leyra | CN360
Texto: Redacción Cuba Noticias 360
Iniciado abril, el llamado mes de la danza, regresó a escena el Ballet Nacional de Cuba (BNC), bajo la dirección general de la Primera Bailarina Viengsay Valdés, con la presentación de un atractivo programa que incluye una obra clásica («El Lago de los cisnes») y tres exitosas piezas del repertorio de la compañía («Celeste», «Tres preludios» y «La forma del rojo»).
Las funciones de esta nueva temporada –que tiene lugar en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional– iniciaron este fin de semana con la puesta en escena de la obra «Celeste», coreografiada por la belga-colombiana Annabelle López Ochoa, con música de Piotr Ilich Chaikovski e interpretado, en el pas de deux, por las figuras Viengsay Valdés y Darío Hernández, Chavela Riera y Ányelo Montero, y Alianed Moreno y Roberto González, además de integrantes del cuerpo de baile.
De «Celeste» se conoce que la inspiración le llegó a la coreógrafa belga-colombiana tras escuchar el Concierto para violín y orquesta en Re op. 35, de Piotr Ilich Chaikovski. «Soñó con Celeste, una estrella que brilla moldeada en las frágiles siluetas de tres bailarinas que danzan en un cielo oscurecido por la noche, representado por las viriles figuras de diez bailarines».
Le siguió en el programa a escena la obra «Tres preludios», con coreografía, vestuario y luces del británico Ben Stevenson; música de Serguei Rachmaninov; y con Daniela Rivero Cernuda al piano. La interpretación estuvo a cargo de la Primera Bailarina Grettel Morejón, junto al Primer Bailarín Dani Hernández y el solista Marcel Gutiérrez, durante el primer y segundo día, respectivamente.
«Tres preludios» para piano, del compositor ruso Serguei Rachmaninov, inspiraron a Ben Stevenson a crear una de sus obras más reconocidas. Poco después de su estreno en 1969, por la Harkness Youth Company, la pieza obtuvo la Medalla de Oro a la mejor coreografía en el Concurso Internacional de Ballet de Varna, Bulgaria, en 1972.
El estreno en Cuba de esta obra estuvo a cargo de Janie Parker y Dennis Poole, figuras del Ballet de Houston, en el Teatro Principal de Camagüey, en 1984, durante el 9no. Festival Internacional de Ballet de La Habana.
En junio de 2022 fue incorporado al repertorio del BNC, montado personalmente por Ben Stevenson, en una serie de funciones que homenajearon a esta destacada figura de la danza escénica.
El segundo acto del clásico «El Lago de los cisnes» fue la obra de cierre de ambas presentaciones durante este primer fin de semana de la nueva temporada. La pieza –en versión de la Prima Ballerina Assoluta Alicia Alonso sobre la coreografía original de Lev Ivánov, y con música de Piotr Ilich Chaikovski– fue interpretada por las Primeras Bailarinas Sadaise Arencibia y Anette Delgado, en el papel de Odette; y Ányelo Montero y Dani Hernández en el personaje de Siegfried.
Esta obra, una de las más famosas del repertorio clásico tradicional, tuvo su estreno en el Teatro Bolchoi de Moscú, el 20 de febrero de 1877. Fue reestrenada en una nueva y exitosa escenificación el 27 de enero de 1895, en el Teatro Marinski de San Petersburgo, con los actos primero y tercero, coreografiados por Marius Petipa, y el segundo y cuarto actos, coreografiados con la participación de Lev Ivánov.
En la versión de «El Lago de los cisnes» creada por Alicia Alonso, la conocida estructura argumental, coreográfica y musical de Petipa-Chaikovski se sintetiza en tres actos y un epílogo.
«El Lago de los cisnes», de acuerdo con especialistas, es una de las obras maestras de la historia de la danza teatral, que perdura como ejemplo excepcional del estilo y los modos expresivos de la danza de toda una época.
El acompañamiento musical de las presentaciones de esta nueva temporada en el Teatro Nacional correspondió a la Orquesta Sinfónica del Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, bajo la dirección del maestro Yhovani Duarte.
Las presentaciones de esta nueva temporada del BNC continuarán los próximos días 6, 7, 8 y 9 de abril, con la incorporación, además de las que se presentaron este fin de semana, de la obra «La forma del rojo», con coreografía de Ely Regina Hernández; música de Ezio Bosso; realización audiovisual de Jenny Sanz y Fermín Vega, con imágenes inspiradas en la obra de la artista Paola Freire; y asesoría de Marta Ortega.
Cada 29 de abril se celebra el Día Internacional de la Danza, desde 1982, luego de que el Comité de Danza del Instituto Internacional de Teatro de la Unesco lo declaró, a partir de la propuesta del maestro ruso Piotr Gusev, en honor a Jean Georges Noverre (1727-1810), nacido un 29 de abril y considerado el padre del ballet moderno.
