FotoCollage: Olympedia & Twitter
Texto: Hugo León
El exatleta cubano Olsvado Lara, quien fuera un notable corredor en las décadas del 70 y 80, falleció en jornadas recientes en La Habana, informaron fuentes deportivas de la isla.
Según reportes de la prensa especializada, Lara murió en horas de la noche del 1ro de enero en la capital cubana. Tenía 68 años de edad y sufría las secuelas de un infarto cerebral que lo golpeó casi una década atrás.
El habanero vivió la cúspide de su carrera en las décadas de los 70 y 80, años en los que trajo al país medallas panamericanas y centroamericanas y participó en las olimpiadas de Moscú 1980.
Su mejor resultado en los 100 metros planos sería en Medellín, en 1978, cuando bajó el reloj hasta los 10.11 segundos, un resultado excelente para la época. Mientras tanto, en los 200 metros planos alcanzó los 20.10 segundos en La Habana, ese mismo año. También se coronó en el relevo corto en la Copa del Mundo de 1979.
Entretanto, en la cita moscovita clasificó a las finales de los 100 y los 200 metros planos, en las cuales llegó quinto y octavo respectivamente.
Con los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 “a la vuelta de la esquina”, todo apuntaba a que Lara estaría cómodamente entre los finalistas de sus pruebas e incluso a una posible medalla. No obstante, tras el boicot de EEUU a las olimpiadas de Moscú en respuesta a la invasión soviética de Afganistán, Cuba secundó a la URSS en el boicot respuesta y no asistió a Los Ángeles, tronchando así la posible medalla del velocista.
La alternativa soviética fueron los “Juegos de la Amistad”, en los cuales el bólido cubano se impuso sin complicaciones con marca de 10.17 segundos.
Después de su retiro como atleta de alto rendimiento fue entrenador en la isla y en otros países de la región, no obstante, con el paso del tiempo, denunció en una entrevista a medios estatales que había sido olvidado y ni siquiera le pagaban un retiro.
En el artículo del semanario Trabajadores, que vio la luz en junio del 2022, Lara mostró sus medallas al periodista y narró la difícil situación en la que vivía, con varios padecimientos y achaques tras el infarto cerebral, y sin más ayuda material que 700 pesos que recibía por una de las medallas ganadas.
En menos de un mes el deporte cubano ha perdido a varias de sus glorias. A mediados de diciembre, murió también en La Habana el famoso boxeador Rolando Garbey, campeón mundial y leyenda del pugilismo en la isla, y esta semana falleció la saltadora Marcia Garbey, también reconocida figura del atletismo en la Mayor de las Antillas.
